Garzón prohibirá la publicidad de dulces y bebidas azucaradas destinada a menores

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha anunciado este miércoles que prohibirá la publicidad de dulces, galletas, helados, bebidas calóricas y otros alimentos considerados "no saludables" que esté dirigida a menores de edad.

Determinados productos, como otras bebidas, 'snacks' o salsas, no podrán anunciarse si superan algunos límites. Por ejemplo, en el caso de los aperitivos salados, no pueden rebasar los 0,1 gramos de sal por cada 100 gramos ni tener azúcares añadidos.

Este tipo de anuncios dejarán de verse en cualquier programa de televisión emitido en horario de protección reforzada a menores (de lunes a viernes entre las 8:00 y las 9:00 o las 17:00 y las 20:00, así como sábados, domingos y festivos entre las 9:00 y las 12:00), en los canales infantiles, en las teles y radios con una elevada audiencia de menores de 16 años o antes, durante y después de programas destinados a los niños. Además, tampoco podrán aparecer en páginas webs, redes sociales, aplicaciones móviles, salas de cine o medios impresos con contenido para menores de 16 años.

Garzón ha dicho que el procedimiento será rápido y se prevé para 2022: "El trabajo está hecho. Tenemos los informes pertinentes para adaptar estos perfiles nutricionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) al sistema de regulación y ya se ha hablado con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia".

El ministro ha justificado la medida para proteger la salud de los menores: "En España, el exceso de sobrepeso es del 23,3% y la obesidad del 17,3%. La suma supera el 40% para los niños de entre seis y nueve años. Son cifras alarmantes y preocupantes". Además, Garzón ha recordado que en las familias más humildes estos casos tienen el doble de incidencia que entre las más pudientes.

Asimismo, ha constatado evidencias de que las distintas estrategias puestas en marcha desde hace más de una década para disminuir la obesidad y el sobrepeso infantil, como el código de autorregulación establecido por la propia industria, han resultado "del todo insuficientes".