Bancaja exige que se auditen también los activos que Caja Madrid aportó a Bankia

El contraataque de Bancaja contra el presidente de Bankia, Rodrigo Rato, no se limita a impugnar el consejo que aprobó encargar una auditoría del valor de los activos aportados por la caja valenciana a la fusión para reducir su peso en la misma. También exige que esta revisión de las valoraciones se aplique a los activos aportados por Caja Madrid, según confirman fuentes cercanas a Bancaja, cuyo presidente y ex vicepresidente de Bankia, José Luis Olivas, cuenta con la alcaldesa valenciana, Rita Barberá, como principal apoyo político en esta batalla.

Bankia celebra esta mañana un consejo de administración crucial para su futuro porque servirá para limar asperezas entre madrileños y valencianos, o bien para escenificar una división muy peligrosa, ya que puede poner la fusión al borde de una ruptura como la que protagonizaron Cajastur y CAM en Banco Base. Y que sería muy similar a aquella: en ambos casos la entidad más fuerte exige reducir el peso de la más débil en la fusión.

Es de esperar que los consejeros de Caja Madrid y los independientes traten de reconducir la rebelión de Bancaja para evitar males mayores. Ahora bien, la cuestión es si los representantes de la caja valencianaa-leccionados en el consejo que ésta celebró el lunes- mantendrán su belicosidad o no. Y todo apunta a la primera opción, porque además de mantener la impugnación judicial de la citada auditoría, pretenden que se extienda a todos los activos aportados por la caja madrileña y las otras cinco (Ávila, Segovia, Insular, Laietana y Rioja) a la fusión. "Si vamos a auditar, vamos a auditorio todo", es el argumento de Bancaja.

Y es que detrás de esta rebelión valenciana se encuentra la sensación de que Madrid ha iniciado un ataque injustificado que cuestiona la "valencianidad" de Bankia, una bandera que ha sido enarbolada por el 'viejo PP' valenciano, el de Camps y Barberá. La Generalitat de Alberto Fabra, en cambio, fue la que se 'tragó el sapo' de la destitución de Olivas como vicepresidente del grupo tras la intervención del Banco de Valencia, donde baria poseía el 30% y controlaba la gestión. En este sentido, el "papelón", según las fuentes, lo tiene Francisco Pons, el sustituto de Olivas como vicepresidente de Bankia y representante del empresariado valenciano con el visto bueno de Fabra.

Así, en la capital del Turia consideran que están siendo utilizados para que BFA-Bankia pueda justificar ante Economía la necesidad de cambiar la estimación del riesgo de los activos aportados por Bancaja a la fusión, como argumento para que el Ministerio de Luis de Guindos le permita cargar contra patrimonio, y no contra beneficios, las provisiones exigidas por el Real Decreto de saneamiento del sector. Algo que Economía no está por la labor de hacer, como informó ayer El Confidencial. 

Desde Madrid, las cosas se ven de una forma radicalmente distinta: "Levantas una piedra en Bancaja y aparece un marrón", explica un directivo de la caja madrileña que solicita mantener el anonimato. Como ejemplo, cita que entraron 300 millones en mora en un solo mes por el lado valenciano del grupo. "Todos los problemas de Bankia han venido por el lado de Bancaja, y no es lógico que sigan teniendo tanto poder cuando su situación es tan mala como ha demostrado lodel banco de Valencia", añade otra fuente de la cúpula madrileña.

El precedente de Martín y Jove

Fuentes jurídicas consultadas por este diario aseguran que la impugnación de Olivas tiene muy pocas posibilidades de prosperar, puesto que la auditoría fue aprobada con los votos de los consejeros nombrados por Bancaja y, además, los consejeros de Bankia deben actuar buscando el máximo beneficio para la sociedad, no para el accionista que los nombró. Por otro lado, "si el canje de la integración se calculó en base a una información que posteriormente ha resultado falsa, es admisible que se reformule", según una de estas fuentes.

Otra, en cambio, considera que esta reformulación no se sostiene, y pone el ejemplo de la reciente sentencia en el pleito de Fernando Martín contra Manuel Jove: Caja Madrid examinó los activos de Bancaja e incluso encargó a Lazard una valoración independiente, así que ahora no se puede llamar andana si no hizo las cosas bien en su momento.

¿Es factible la ruptura de Bankia?

Más allá de estas cuestiones, la gran pregunta es si es factible que Bankia se rompa como ocurrió el año pasado con Banco Base. La respuesta es que posible es, tanto jurídica como operativamente. De hecho, todavía no se han integrado las plataformas tecnológicas de Caja Madrid y Bancaja, sino sólo las de algunas de las pequeñas; está previsto que la integración de las dos grandes se efectúe en Semana Santa, para lo que va a quedarse sin vacaciones un equipo de unas 500 personas.

Ahora bien, el coste sería tan grande en términos de imagen, credibilidad y confianza, que nadie piensa que las cosas vayan a tensarse tanto como para llegar a la ruptura. "Ahora que estamos intentando convencer a los inversores internacionales de que España no es Grecia, una ruptura así tiraría por tierra todos estos esfuerzos y se nos volvería a ver como un país bananero", explica otra de las fuentes.

"Además, el Banco de España no lo va a permitir. No puede tolerar otro desastre como el de Banco Base, las consecuencias serían catastróficas para todo el sector al tratarse de una entidad sintética como Bankia", añade otro experto en el sector. Ahora bien, las opciones de que la entidad continúe en solitario cada vez son menores después de que Economía haya vetado su puja por Unnim y de su negativa a aceptar que cargue el grueso de las provisiones del Decreto contra fondos propios.