OHL entra en Kuwait con un contrato de construcción de 645,5 millones de euros

OHL ha desembarcado en Kuwait al adjudicarse en consorcio un contrato de construcción en este país por un importe de 645,5 millones de euros, según informó el grupo.

La compañía que controla y preside Juan Miguel Villar Mir refuerza así su internacionalización y su presencia en la zona del Golfo Pérsico, donde ya tiene actividad en Qatar.

El proyecto logrado en Kuwait consiste en la construcción de un viaducto urbano de 11 kilómetros de longitud en la capital del Estado, que tiene como fin contribuir a descongestionar el tráfico.

La infraestructura discurrirá sobre el actual trazado de la avenida Jamar Abdul Nasser, en el ámbito urbano de la ciudad de Kuwait, en sentido Noreste-Suroeste, y forma parte del ambicioso programa de actuaciones urbanas que el Ministerio de Obras Públicas está llevando a cabo en la capital.

OHL y sus socios del consorcio adjudicatario deberán ejecutar la obra manteniendo el tráfico, para lo que han diseñado un sistema constructivo con soluciones organizativas y tecnológicas adecuadas para atender esta exigencia del proyecto.

La compañía de Villar Mir considera que Kuwait es actualmente uno de los países de Oriente Medio con mayores perspectivas de actividad en cuanto a construcción de todo tipo de infraestructuras, con el fin de adecuarlas a sus necesidades.

OHL subrayó en un comunicado que la consecución de este contrato es resultado del "notable esfuerzo" de desarrollo de negocio realizado por el grupo en el país del Golfo en los últimos años. Así, estima que con la consecución de este "emblemático proyecto" logra entrar "de lleno" en el mercado constructor del país.

El grupo da además un paso más en su estrategia de internacionalización. A cierre del pasado mes de septiembre, OHL ya obtenía del mercado exterior el 67,3% del total de sus ventas y el 94,6% del Ebitda.

La compañía apuntó entonces su previsión de que estas tasas continuarán creciendo en el futuro, dado que la actividad internacional copaba ya en septiembre el 91% de su cartera de contratos de pendientes de ejecutar a largo plazo, y el 56,4% de la de corto plazo.