Soriano divide al consejo de Spanair por su candidatura a la presidencia del Barca

La cada vez más probable candidatura del presidente de Spanair, Ferrán Soriano, a la presidencia del Barcelona, tiene dividido al consejo de aministración de la aerolínea, según han avanzado fuentes cercanas a los diversos accionistas de la compañía. Por un lado, los inversores más institucionales, como el consorcio Turismo Barcelona, la firma de capital riesgo Catalana d'Iniciatives o Fira de Barcelona, que apoyan el proyecto de presidir el Barça; y por otro, los accionistas vinculados al sector privado, como la patronal Femcat y la aerolínea SAS, que creen que el trabajo de reflotar un proyecto como Spanair precisa una dedicación exclusiva.

El próximo Consejo de Administración se celebrará el viernes 26 de marzo y tiene carácter ordinario, si bien fuentes de Spanair han declinado comentar si en el mismo se comentará el tema de que Ferrán Soriano opte a presidir el Barça. Soriano, que ya fue vicepresidente económico del Barça con Joan Laporta, nunca ha confirmado ni desmentido su intención de presentarse a la presidencia del Barcelona, en la línea de lo que han hecho otros candidatos, como el que en principio parte de favorito en las encuestas: Sandro Rosell, que ya fue vicepresdiente con Joan Laporta en la primera etapa.

Ferrán Soriano no necesita que el Consejo de Spanair le dé el visto bueno para presentarse, pero es conveniente que haya un cierto consenso al respecto. Las fuentes consultadas han señalado que poco a poco las opiniones en el Consejo se están volcando hacia la alternativa de que Soriano compatibilice la presidencia de Spanair con la del Barça. En este sentido, algunos nuevos accionistas, como los propietarios de Mediapro, Jaume Roures, Tatxo Benet y Gerard Romy, que han entrado recientemente en el accionariado de Spanair aportando cinco millones de euros, también son partidarios de que Soriano ejerza la doble presidencia.

Sin embargo, el sector más favorable -entre los que se encuentra el presidente del Gremio de Hoteleros, Jordi Clos, o el director de Fira de Barcelona, Agustí Cordón- también pone condiciones, como que Soriano ejerza de presidente y no de presidente ejecutivo como 'de facto' ha estado haciendo durante toda la fase inicial de Spanair. También reclaman que el consejero delegado de Spanair, Mike Szücs, asuma un mayor protagonismo tanto en la gestión como en la dimensión pública. Entre el sector privado hay voces reticentes, como la del presidente de Husa, Joan Gaspart, aunque se debe más a sus vinculaciones personales con el club azulgrana, que presidió antes de Laporta.

Los que defienden la bondad de que Soriano ostente ambas presidencias creen que Spanair y el Barcelona pueden beneficiarse mutuamente: Spanair de la popularidad del Barça como marca reconocida mundialmente y el club de los fondos provenientes de la aerolínea, ya que incluso algunos consejeros abogan por que Spanair se anuncie en la camiseta del equipo. Estos consejeros apuestan por que Sorianio encabece una candidatura en solitario y que luego integre a la del oficialista Alfons Godall, algo a lo que éste podría estar dispuesto. Las elecciones serán el 13 de junio y los candidatos tienen hasta finales de abril, seis semana antes, para hacer pública sus intenciones.

Miuentras tanto, Spanair perdió cerca de 100 millones de euros en el 2009, una cifra inferior a los 157 millones de pérdidas que registró en 2008. El pasado mes de enero la empresa cerró la reestructuración de la compañía, acordando el despido de 117 pilotos a cambio de que este colectivo se hiciera con el 5% del capital de la compañía y obtuviera una representación en el consejo, y pactó con los sindicatos despedir a 75 tripulantes de cabina a cambio de cederles otro 1% del accionariado.