Mazazo para Alcaraz: las enseñanzas que deja Australia y lo que ni él puede responder

"No sé lo que ha pasado". Así de contundente se mostró en rueda de prensa Carlos Alcaraz. Pocos minutos antes, el alemán Alexander Zverev había eliminado al español del torneo con un sorprendente 6-1, 6-3, 6-7 (2) y 6-4, en poco más de tres horas de encuentro. El Open de Australia llegó a su fin para el murciano, que se despedía del público de Melbourne en los cuartos de final. ¿El vaso medio lleno? Es su mejor resultado conseguido en el primer Grand Slam del año. ¿El vaso medio vacío? Ya van seis meses sin ganar un torneo para Alcaraz, quien no levanta trofeo desde aquel mágico Wimbledon de la pasada temporada.

Lo que el Open, la primera gran competición del curso, enseña a Alcaraz es que debe decidir qué tipo de tenista va a ser. El ránking ATP asegura que el español es el número dos del mundo, más que merecido (aunque entregaría su posición a Medvedev si el ruso saliese como campeón de Australia), también lo confirma su mejor nivel sobre las pistas. Solo Novak Djokovic se muestra más sólido que Alcaraz a pleno rendimiento. Pero esa faceta hace tiempo que no se ve.

El murciano no entró al partido. Hizo un missing absoluto en los primeros compases de los cuartos de final. Es cierto que Zverev, rival que le tiene tomada la medida y que ya le había superado en varias ocasiones, realizó un encuentro exquisito, probablemente su mejor tenis. Pero el campeón olímpico alemán lo tuvo demasiado fácil.

TE PUEDE INTERESAR

Adiós al sueño de Carlos Alcaraz: Zverev sofoca la rebelión del español en los cuartos de Australia

Rubén Rodríguez

"Me encantaría decir qué ha sucedido, pero no me he encontrado con buenas sensaciones desde el inicio. Cometí varios errores, que había podido solventar en otros inicios de partido", reflexionó Alcaraz, que no encontraba demasiadas respuestas al problema.

El número dos del mundo lograría sacar orgullo a partir del tercer set, ya con dos mangas por debajo y con la sensación de que Zverev era imbatible. Su mentalidad le permitió apretar los dientes, llevarse el duelo y llegar a un durísimo cuarto set que acabaría por ser para el alemán. "El saque ha sido malo, ni porcentajes ni direcciones... Contra jugadores de este nivel es difícil remontar y volver (...) Porque si quiero ganar más Grand Slams, este tipo de cosas tengo que mejorarlo", insistió Alcaraz.

"No estoy preocupado. Le daré una vuelta y volveré". Solo la determinación con la que habla Alcaraz de sus propias dudas hace pensar que se guarda un nuevo as bajo la manga. El 2024 acaba de empezar para el murciano después de una brillante temporada que terminó mal, entre lesiones y derrotas.

Ahora queda encontrar las respuestas mientras Djokovic, Sinner, Zverev y Medvedev pelean en Australia por ver quién se lleva el primer Grand Slam del año... con todas las miradas dirigidas al serbio.