"No entendieron lo que pasó": la bielorrusa Azarenka se desquita tras los abucheos de Wimbledon

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Este domingo en el All England Club se enfrentaron la ucraniana Elina Svitolina y la bielorrusa Viktoria Azarenka en la 3ª ronda del cuadro femenino del torneo de Wimbledon. Un partido complicado y bajo la sombra del conflicto bélico que salpica a los tenistas de los países involucrados cada vez que disputan un partido.

El encuentro transcurrió con normalidad, imperando el deporte sobre la política. Sin embargo, todo cambió tras la victoria de Svitolina, que logró así colarse en cuartos de final en tres sets (6-4, 4-6 y 6-7). Desde el inicio de la guerra, la ucraniana tiene por norma no dar la mano a las tenistas de nacionalidad rusa o bielorrusa al acabar el partido, ya que está en contra de su participación en los circuitos internacionales.

Conocedoras de esta decisión, sus rivales la felicitan de la victoria levantando la mano tras despedirse del juez de silla. En el partido de este domingo, Azarenka, de 33 años, levantó el pulgar y enseguida se dirigió a guardar sus raquetas y recoger sus cosas para salir de la pista lo más rápido posible. Al encaminarse a los vestuarios, el público londinense comenzó a abuchearla y recriminarla no haber dado la mano a su rival tras la victoria.

"No he hecho nada malo"

Azarenka, que simplemente no quiso importunar a la ucraniana, no se tomó nada bien la actitud de la multitud allí congregada. Con una sonrisa irónica, levantó las manos y las juntó sobre su cabeza, como pidiendo que la esposaran, lo que provocó que la grada de la pista 1 del mítico club privado de tenis aumentara su enfado y, por ende, los gritos y abucheos que la increpaban.

"No puedo controlar a la multitud. No estoy segura de que mucha gente entendiera lo que estaba pasando", dijo impotente y enfadada en la sala de prensa al no entender el trato que se le da. "Esto ha sido una constante durante los últimos 18 o 19 meses. No he hecho nada malo, pero a veces sigo recibiendo un trato diferente",, aseguró Vika. que añadió que "si ella (en referencia a Svitolina) no quiere estrechar la mano de rusos o bielorrusos lo respeto y ya está".

Svitolina "no quiere estrechar la mano de rusos o bielorrusos lo respeto y ya está" dijo Azarenka

Por su parte, Svitolina, de 28 años, entró en la sala de prensa minutos después y afirmó que "las organizaciones de tenis tienen que publicar una declaración en la que se informe de que no habrá apretón de manos entre los jugadores rusos, bielorrusos y ucranianos. Quizás la gente no lo tiene claro y algunas personas no saben realmente lo que está sucediendo" e insistió a que "hasta que las tropas rusas estén fuera de Ucrania y recuperemos nuestros territorios, no nos daremos la mano".