"Take it easy, hermano": los cinco puntos de Alcaraz que pueden ser fundamentales en París

Carlos Alcaraz ha firmado un Conde de Godó para enmarcar. El español ha jugado con una superioridad insultante a lo largo del campeonato, donde ha demostrado su mejor versión para convertirse en un jugador intratable en arcilla. Lo que ha conseguido el balear en Barcelona está solo al alcance de los mejores tenistas del circuito y, hoy por hoy, ha confirmado que es uno de los grandes favoritos para levantar el título en París. Aunque son palabras mayores.

"Mi sueño es ganar Roland Garros y Wimbledon", decía un joven Alcaraz de solo 12 años en un vídeo que se hizo viral hace algunos meses. Ese niño, que soñaba con hacerse con dos de los títulos con más solera del tenis, se encuentra este año ante la oportunidad real de luchar por todo, si bien es cierto que no será nada sencillo. Pero su impresionante despliegue en tierra batida y el enorme nivel que está mostrando hacen pensar que no hay muchos rivales que puedan jugarle de tú a tú.

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Con su victoria en el Godó, Alcaraz se ha hecho con el tercer título de esta temporada, tras Buenos Aires e Indian Wells. Pero, sobre todo, las palabras de su rival, Stefanos Tsitsipas, tras derrotarle en la final, simbolizan su superioridad: "Carlos, take it easy, hermano" ("Carlos, tómatelo con calma"). O, dicho de otra manera, una manera irónica y graciosa de plegarse a su juego, dando a entender que, estando a ese nivel, hay muy pocos jugadores que sean capaces de hacerle sombra.

Y es que, a lo largo del torneo, Alcaraz lo hizo todo bien: se mostró muy solvente con el saque, realmente poderoso desde el fondo de la pista, muy rápido de piernas y muy fino con las dejadas. El español hizo un torneo perfecto, en el que no perdió ni un solo set y donde jugó posiblemente al nivel más alto que se le ha visto desde que es profesional. Voló sobre la arcilla y, ante Tsitsipas, dio una lección sobre cómo hay que desarmar a un jugador de clase mundial como el griego.

Por esa razón, Alcaraz empieza a hacer números sobre lo que debe de hacer para recuperar el número uno, posición a la que podría llegar a Roland Garros y, por tanto, lograr una importante ventaja competitiva por el cuadro que le puede tocar. Tras el tropiezo de Djokovic en Banja Luka y su renuncia a jugar en Madrid, el español sabe que está a 365 puntos de diferencia del serbio. Si consigue revalidar el título en la capital española, Alcaraz saldrá a solo cinco puntos del número uno.

Una diferencia que puede enjugar en Roma, donde la pasada temporada no participó y, por tanto, ya sumaría ganando un solo partido. La superioridad que está mostrando Alcaraz, unida a las ausencias de Rafa Nadal y Novak Djokovic en Madrid, hacen prever que el camino del murciano hacia el título en la Caja Mágica es más sencillo. Pero solo sobre el papel pues, cuando toca saltar a la pista, llega el momento de demostrar que merece pasar de ronda.

Solo tiene 19 años, pero, hasta la fecha, Alcaraz no había sido considerado como el gran favorito a todo. Y, en caso de triunfar en Madrid, solo necesitaría cinco puntos para jugar en Roland Garros como número uno del mundo, con la ventaja que conlleva. No es menos cierto que París es territorio de Rafa Nadal, pero su larga inactividad por lesión, la caída en el ránking que le obligará a jugar rondas previas y, sobre todo, las dudas sobre su físico, abren una puerta para Alcaraz.

Si a ello le sumamos que Djokovic está teniendo serias dudas en arcilla, donde solo ha ganado dos partidos en lo que va de temporada, Alcaraz se erige como el gran favorito por encima de todos. Por esa razón, esos hipotéticos cinco puntos que puede necesitar para volver a lo más alto del ránking ATP son más importantes que nunca y, sobre todo, no perder de vista el consejo de Tsitsipas: "Carlos, take it easy". Mientras siga disfrutando de su mejor nivel, los resultados llegarán.