Nadal se quita la "tensión extra" tras sellar el número uno del mundo el año de su retorno

Rafa Nadal ha conseguido el primer objetivo que tenía establecido en Londres: mantener el número uno hasta final de año. El tenista español, tras su victoria sobre David Ferrer de este martes y su triunfo ante Stanislas Wawinka este miércoles (7-6 y 7-6), ha conseguido, de manera matemática, ser el mejor tenista del mundo hasta final de año. A Nadal se le vio muy cansado ante el suizo y, a pesar de que en los momentos definitivos pudo sacar su castapara sobreponerse, se le vio pasar momentos complicados sobre la pista. Ahora, tendrá tiempo para descansar, pues no volverá a jugar hasta el viernes, cuando se enfrentará aTomas Berdych a las 21:00 horas.

El español celebró con mucha rabia su victoria. Brazos al cielo, saltos sobre la pista y una enorme sonrisa de oreja a oreja para celebrar una victoria que le permite ser el número uno hasta final de año. Visiblemente emocionado y muy contento, incluso al estampar su firma contra la cámara de televisión como ganador del partido, se le vio totalmente desbordado por la alegría. Nadal respira tranquilo tras sellar el número uno, yaseguró estar "muy feliz"por su triunfo, que ahora le ha hecho eliminar la "tensión extra" y quele permite "sólo pensar en el torneo". El balear respira tranquilo tras conseguir su primer objetivo.

Pero no fue nada sencillo, pues Wawrinka no le facilitó la labor. El suizo estuvo muy activoa lo largo del partido, dominando buena parte del choque. Pero el de Manacor supo sacar su mejor versión en el momento justo: "Wawrinka me estaba comiendo, y era necesario que cambiara algo. Si no arriesgaba, era la crónica de una muerte anunciada", señaló a declaraciones a TVE. Visiblemente felizpor su triunfo, Nadal se ha quitado una carga de encima. Con el pase a semifinales encarrilado, ahora respira tranquilo en busca de luchar por un título que aún no tiene en su poder.

El tenista nacional acabará 2013 como el mejor jugador del mundo, después de un 2012 para el olvido. Sus problemas en la rodilla le tuvieron buena parte de la pasada temporada alejado de las pistas, desesperando a un Nadal que no veía el momento de su vuelta. Tras siete meses alejado del mundo del tenis, el español reapareció en Viña del Mar.Con el paso de los meses, Nadal se fue encontrando mejor, hasta su recuperar su nivel. Ahora, Nadal ya puede decir sin miedo a equivocarseque éstaes la mejor temporada de su carrera.

En 2013, Nadal ha conseguido levantar 10 títulos, entre los que se encuentran Roland Garros y el US Open,un gran logro para unjugador que llevaba medio año alejado de las pistas. Con sus victorias ante Ferrer y ante Wawrinka, Nadal ya sabe que se quedará con el número uno hasta final de año. Galardonado por la ATP con el premio al 'Regreso del Año', el español está firmando un año de ensueño. Una vez conseguido el primer objetivo, su próxima misión es convertirse en 'maestro', un título que todavía no ha conseguido.

Wawrinka puso a Nadal en dificultades

De un día para otro, Nadal ofreció dos caras de su juego. Ante Ferrer, el balear se mostró sólido, contundente, cerrando los puntos. Velocidad yprecisión se aunaron para desarmar al de Jávea, incapaz de frenar el vendaval de juego que era el balear. Sin embargo, la situación fue diametralmente opuestaante Wawrinka. El español sufrió en exceso para sacar a delante sus juegos, con mucho trabajo, y sin conseguir continuidad desde el fondo de la pista. A pesar de ello, en los momentos claves tuvo ese 'plus' para acabar con su rival, quien todavía no ha ganado un sólo set en su carrera al español.

En el primer set, se veía a Wawrinka sin miedo, activo,sin nada que perder, y a un Nadal ciertamente atenazado, consciente de lo que se estaba jugando. Al helvético se le notaba con el brazo suelto, mientras que el español no terminaba de entrar en el partido. El balear pronto consiguió una rotura que le ponía muy a favor el partido, pero nada más lejos de la realidad. Wawrinka le devolvió el 'break' a Nadal, para ponerse por delante en el set y obligar al número uno del mundo a ser fuerte mentalmente para sobreponerse.

El español apretó los dientes, consciente de que su juego no estaba siendo bueno, para tratar de apelar a la sencillez. Jugar con primeros saques, no ajustar en exceso y obligar a 'rallys' largosque dieran lugar al error no forzado de su rival. Tras conseguir alcanzar el 'tie-break', el español le trasladóla presión a Wawrinka. Con este cambio de dinámica, el Nadal se sintió mucho más cómodo y, a pesar de haber sufrido durante el primer set en exceso, consiguió hacerse con el set. La segunda manga ya se veía de otra manera.

Con el primer parcial a su favor, Nadal comenzó a sentirse más cómodo. Liberado de toda tensión, el segundo parecía distinrto, pero Wawrinka volvió a aparecer. En el tercer juego, Nadal conseguía romper el servicio, pero el suizo le devolvía el 'break' poco después. Condenados al 'tie-break', el español volvió a mostrar su solidez en el desempate para llevarse el partidoy, con él, mantener el número uno del mundo.Con esteimportante triunfo, Nadal vuelve a sonreír: el español ha certificado el número uno del mundo hasta final de año. De vivir su peor año ha cerrar una temporada que no olvidará fácilmente.