El 'calculador' Nadal deja "vivo" a David Ferrer perdonándole el 'rosco' en Londres

Rafael Nadal ha demostrado ser un gran campeón. El tenista balear, actual número uno del mundo, es consciente de todo lo que se juega en el Torneo de Maestros pero, aún así, ha tenido un momento de calma para ver más allá de su propio ombligo. Con la pelea por mantener el número uno del mundo abierta y con la idea de convertirse en 'maestro' por primera vez en su carrera, ha sabido entender que podía levantar el pie del acelerador ante su gran amigo David Ferrer, al que no quiso humillar y al que le concedió la oportunidad de cerrar el partido con buen sabor de boca.

El tenista balear ofreció su mejor imagen en la pista O2, con un soberbio tenis ante el que nada pudo hacer Ferrer. El alicantino, visiblemente cansado tras la final del domingo, sucumbio ante el mejor Nadal, que no quiso aplastar a su granamigo. Con 5 a 0 a favor en el segundo set, y con Ferrer completamente hundido en la pista, Nadal levantó el pistón. El balear era consciente de que tenía el partido ganado y que no tenía por qué aplastar al alicantino, que pudo sumar dos juegos seguidos antes de que el de Manacor cerrara el partido. Consciente de que haberle endosado un 'rosco' podría suponer la eliminación del Torneo de Maestros, Nadal no quiso sacar el rodillo en un momento en el que sabía que el partido estaba ganado.

"Lo positivo es que David Ferrersigue estando vivo y mantiene sus opciones de clasificación intactas. Me alegro mucho de esta gran victoria, pero lo siento evidentemente por David. Ha tenido poco descanso y le habrá afectado probablemente para tener la mejor adaptación para empezar el torneo", señalaba después del partido. El balear es consciente de que este torneo es muy distinto a otros y que ganar un simple juego puede suponer la clasificación a las semifinales del torneo. Ferrer tiene aún todas las opciones vivas y los dos juegos que le 'regaló' Nadal pueden ser fundamentales.

Las opciones más claras para que Ferrer se clasifique a la siguiente ronda pasan por Nadal, que le puede echar una mano: si ganaa Wawrinka (este miércoles a las 15:00 horas) y a Berdych, el alicantino necesita hacer lo propio con ambos (se mide al checo este miércoles a las 21:00 horas). En caso de que no fuera así, ya entraría en juego un hipotético desempate, que se mediría primero por partidos ganados, luego por sets logrado y, por último, por juegos conseguidos. Por ello, los últimos dos firmados por Ferrer ante Nadal se pueden antojar fundamentales a corto plazo.

Una imagen muy distinta a la del pasado sábado

Rafael Nadal, esta vez sí, mostró su mejor cara anteDavid Ferrerpara conseguir su primera victoria en elTorneo de Maestros(6-3 y 6-2) y colocarse a un solo partido de certificar el número uno del mundo hasta final de año. El balearolvidó su derrota hace sólo tres díasante el alicantino en París-Bercy para mostrar su mejor versión en Londres y llevarse una gran victoria en un duelo fratricida. Con este triunfo,Nadal da un paso importante en el Grupo B, ante el rival, a priori, más fuerte contra el que se enfrentará en esta primera frase.

Nadal comenzaba el torneo con dos importantes ideas en la cabeza: mantener el número uno del mundo y tratar de convertirse en 'maestro', un logro que aún no ha conseguido en sus cinco participaciones previas. El balear era consciente de que, para acabar el año como el mejor clasificado en el ránking ATP, necesitaba ganar como mínimo dos partidos en Londres. A priori, parecería una misión sencilla para un jugador de su nivel, pero en su última participación, en 2011, tan sólo fue capaz de lograr una victoria, una presión añadida.

Por si fuera poco, el mallorquín era consciente deque su primer rival no sería nada sencillo, tal y como le había demostrado días atrás en Francia. En los últimos tiempos, Ferrer y Nadal se habían cruzado en muchas ocasiones, con la gran mayoría de victorias cayendo a favor del manacorense.Pero en París, 'Ferru' parecióhaberle encontrado el punto a Nadal. Nada más lejos de la realidad, pues elnúmero uno del mundo demostró haber aprendido de sus errores, jugando muchomás agresivo y con máyorprofundidad.

Un primer set para acabar con los fantasmas

De hecho, Nadal saltó a la pista completamente mentalizado de su necesidad de salir a por todas desde el principio. Ya en el primer juego del partido, tal y como le gusta a él, el balear consiguió romperle el servicio a Ferrer. Muy pronto se le ponía el partido de cara, pero sólo un juego después Ferrer le devolvía la moneda. A pesar de ello, al balear se le veía mucho más entero, más metido en el partido, y pegando mucho más profundo. Ferrer sufría en exceso y, aunque mantenía el tipo, se veía a Nadal con mejor físico.

Con elquinto juego en marcha, Ferrer no fue capaz de igualar el alto nivel que estaba mostrando Nadal, lo que le hizo perder el juego, que certificó el balear con su servicio. Después de que ambos tenistas volvieran a mantener sus respectivos servicios, Nadal iba a llevarse el primer set con un nuevo 'break' (6-3). Este juego, será recordado por un estratosférico punto de Nadal que, tras correr de un lado a otro de la pista a merced de Ferrer, se inventó una de sus 'bananas' para meter la bola en la esquina.

Segundo set arrollador que pone a Ferrer contra las cuerdas

Este primer set le hizo mucho daño a Ferrer, que se vino abajo mental y físicamente. El de Jávea acusó en exceso su cansancio, después de haber disputado una final sólo dos días atrás. Nadal empezó a hacer fluir su juego, con golpes muy profundos de un lado a otro, ante un Ferrer que se mostraba incapaz de mantener su nivel de juego. Esto permitió al balear bajó algo el pistón de su tenis, lo que no le impidió certificar un contundente 5 a 0 con el que ponía el partido muy a su favor.

Ferrer 'tiró' de orgullo para conseguir dos juegos que le supo a muy poco. Es la única concesión que le dio Nadal, pues cerró el partido con una nueva rotura para llevarse el segundo set y el partido (6-2). Con un gran partido, Nadal consigue su primera victoria en el Torneo de Maestros, y se pone a una sola victoria de mantener el número uno del mundo hasta final de año. Por su parte, Ferrer se complica su camino, pues está obligado a ganar sus partidos ante Wawrinka y Berdych, y esperar a que Nadal le eche una mano.