Marc Márquez busca la calma que Lorenzo amenaza con quitarle

Cuando este domingo los pilotos de MotoGP den forma a la parrilla de Silverstone, Marc Márquez será el alumno más aventajado. Una vez más, el piloto de Repsol Honda fue el más rápido en una sesión de calificación en la que su hambre voraz no dejó nada para sus rivales. Las únicas migajas que se desprendieron se las llevó Jorge Lorenzo cuando demostró que es capaz de tutear a Márquez arrebatando, durante escasas vueltas, la posición de privilegio en la Q2. El GP de Gran Bretaña es cosa del mallorquín, pero Brno es un dolor que el actual campeón no ha conseguido mitigar. El paso de los días no ha sido suficiente y ante la amenaza de Lorenzo, Márquez necesita encontrar la calma necesaria para volver a su normalidad: ganar.

El sábado no arrancó con buen pie. En la tercera sesión de entrenamientos libres, Marc se fue al suelo después de firmar el mejor tiempo de la sesión: “Se por qué me he caído, porque iba un poco pasado”. Este incidente sin consecuencias se convirtió en un aviso de lo que le esperaba en la Q2, una sesión que el líder definió como “complicada porque costaba que el neumático delantero cogiese temperatura”. El principal objetivo que se marcó el equipo Repsol Honda pasaba por adaptarse a Silverstone, una pista larga y llena de baches que deben aprender a absorber: “Tienes que ir todo el rato con tensión, no es como otro circuito que te puedes relajar y pensar en administrar la ventaja porque aquí nunca es suficiente, en un bache te puedes caer”.

A pesar de ser un trazado extraño, Márquez ha demostrado a lo largo de la presente temporada que es capaz de domar aquellas pistas que no parecen llevarse bien con su Honda. Lo que no podrá controlar será la climatología: “Esperemos que tengamos un día soleado o al menos que no llueva para intentar luchar por la victoria desde la primera vuelta”. Para ello, el actual campeón esconde sus armas y no da ni una sola pista: “Podemos plantear la carrera de diferentes maneras: puedo tirar desde el principio si salgo bien y si no, esperar un poco y tirar más al final o tirar al medio. Depende”. Aunque admite que las salidas siguen siendo su punto débil: “No está claro qué me pasa porque en los entrenos salgo más o menos bien”.

Después de firmar el mejor crono, Marc dio la clave en sus primeras palabras: “Intentaré estar calmado y hacer mi carrera”. El líder sabe que tiene que volver a controlar la situación después de lo sucedido en la República Checa. Su cuarto puesto ha tenido más relevancia de puertas para fuera aunque la ambiciosa cabeza de Márquez ha desterrado la idea de volver a vivir algo semejante. El piloto de Repsol Honda definió la actuación en Brno como la peor de su carrera en la categoría reina, algo que no quiere repetir a pesar de tener el título prácticamente revalidado. De ahí que templar los ánimos, mantener nervios de acero, frenar al impetuoso piloto que se desata en algunos momentos y, al fin y al cabo, tener calma resultará vital.

El líder necesitaba probarse, saber, como él ya ha comentado, que no se le ha olvidado pilotar: “Estoy contento por esta pole, más que nada por cómo me estoy encontrando este fin de semana. Estoy comprobando que el ritmo me sale fácilmente y esto es importante en este circuito”. Más aún cuando se tiene en cuenta que en los últimos cuatro años, Silverstone tiene un nombre propio: Jorge Lorenzo. El piloto de Yamaha se llevó la victoria en 2010, 2012 y el año pasado en la última curva. El Mundial espera una reedición de aquel enfrentamiento después de que Lorenzo haya conseguido mejorar los eternos problemas de su moto con los neumáticos de Bridgestone para ser el único piloto capaz de amenazar la calma de Márquez.