Damián Quintero, medalla de plata en el estreno del kárate olímpico
Gran final del español ante el ídolo local, Ryo Kiyuna, que le supera en más de un punto con un ejercicio de máxima complejidad. Quintero, primero en las rondas de clasificación, hace historia con la primera plata olímpica en kárate
Tenía ya más de 100 medallas entre campeonatos nacionales, europeos y mundiales, pero la de este viernes será indudablemente la más preciada. Al igual que Sandra Sánchez hace dos días, Damián Quintero (37 años) ha aprovechado en Tokio el estreno olímpico del kárate para aumentar su extraordinario palmarés con una plata que le sitúa definitivamente como uno de los dos mejores karatecas de la historia en su especialidad.
El luchador español disputó la final ante el japonés Ryo Kiyuna, un deportista casi imbatible, que solo había perdido en una final hasta la fecha (cayendo precisamente contra Quintero). De madrugada en España, el español fue primero, con mucha claridad, tanto en la ronda de eliminación como en la clasificación para luchar por las medallas. En la tarde nipona, hora española del aperitivo, bordó su coreografía (el kata 'Suparinpei') y Quintero con extremo rigor y seriedad, pero su puntuación final (27.66) no bastó para derrotar al competidor local (que obtuvo 28.72 con el kata 'Ohan Dai').
#KarateKata
— MisterChip (Alexis) (@2010MisterChip) August 6, 2021
[KA] KARATE: Kata masculino.
Damián Quintero #ESP (37 años y 33 días) es el 4º español más veterano en ganar una medalla olímpica en una prueba individual masculina, tras Santiago Amat (45-051), Ángel León (44-297) y Joan Llaneras (39-091).pic.twitter.com/LfANoJCzKY
Nacido en Buenos Aires (Argentina) e instalado en Torremolinos (Málaga) desde los cinco años, Quintero comenzó a practicar kárate a los siete en el Club Goju-Ryu (uno de los más laureados de nuestro país). En 2002 se mudó a Madrid, donde se licenciaría como ingeniero aeronáutico y estudiaría dos másteres. Campeón de España y de Europa numerosas veces en la modalidad de kata individual, campeón también del mundo en 2014 (subcampeón en 2016 y 2018), número uno del escalafón mundial durante varias temporadas, su carrera es otra demostración del valor del esfuerzo en una jornada duplicada: trabajar 10 horas al día en una empresa para machacarse el cuerpo en los ratos libres, haciendo buena la célebre máxima japonesa: "Sangre en el 'dojo' [lugar de entrenamiento], risa en la calle".
El kata es una secuencia de movimientos establecidos (rituales, bloqueos y golpes al aire) que se pueden practicar en solitario o en parejas, y que existe en todas las artes marciales, como forma de preparación de combates. El ejercicio requiere una concentración extrema, que mantenga el ritmo exacto del ejercicio. Damián no tuvo oposición en las rondas de clasificación, de madrugada (hora española), pero en la final hubo de ceder ante el representante japonés, que actuó en segundo lugar.
Quintero y el seleccionador español, Jesús del Moral, habían estado concentrados el último mes de preparación en Mallorca y Sierra Nevada. Evidentemente, acertaron. La medalla de plata prolonga la excelente relación de la delegación española con los deportes 'nuevos' (tres trofeos hasta el momento) y sigue confirmando su solidez después de un inicio (como tantas otras veces) gris.
Tenía ya más de 100 medallas entre campeonatos nacionales, europeos y mundiales, pero la de este viernes será indudablemente la más preciada. Al igual que Sandra Sánchez hace dos días, Damián Quintero (37 años) ha aprovechado en Tokio el estreno olímpico del kárate para aumentar su extraordinario palmarés con una plata que le sitúa definitivamente como uno de los dos mejores karatecas de la historia en su especialidad.