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El Open de España, un torneo que se les atraganta a los nuestros
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HOY COMIENZA EL ABIERTO EN CATALUÑA

El Open de España, un torneo que se les atraganta a los nuestros

Con mucha ilusión, muchas ganas y muy buenas sensaciones, pero sin palos de golf y sin maletas, llegaron Pablo Martín y Pablo Larrazábal a Caldes de

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El Open de España, un torneo que se les atraganta a los nuestros

Con mucha ilusión, muchas ganas y muy buenas sensaciones, pero sin palos de golf y sin maletas, llegaron Pablo Martín y Pablo Larrazábal a Caldes de Malavella en Catalunya, donde se disputará a partir de este jueves el Open de España. Salieron de Corea, hicieron varias escalas y finalmente llegaron a España, no así sus herramientas de trabajo, que al parecer siguen “dando vueltas por el aeropuerto de Londres”. Otros golfistas españoles como Miguel Ángel jiménenz, atravesaron España conduciendo su coche. De su Málaga natal hasta Girona por carretera. Todo ese esfuerzo para tratar de recuperar el prestigio en una competición que a los españoles se les ha resistido los últimos siete años.

 

El último español en conquistar el Open de España fue Sergio García, y lo hizo en El Cortijo en 2002, en Gran Canaria. Para esta edición número 83 del torneo, habrá 33 españoles compitiendo -cinco aficionados y 28 profesionales- entre ellos estarán Miguel Ángel Jiménez, Gonzalo Fernández-Castaño, Álvaro Queirós, Pablo Martín e Ignacio Garrido, que ya rozó el título el año pasado pero finalmente fue el escocés Paul Lawrie el que se llevó el trofeo. Lawrie llega a Cataluña para defender su título. Encabeza la legión extranjera junto a su compatriota Colin Montgomerie, al irlandés Paul McGinley, al francés Thomas Levet y al danés Thomas Björn.

 

150 profesionales y seis aficionados repartidos en 53 equipos se disputarán el título en los próximos cuatro días. 72 hoyos (Stronke Play) en un circuito que está considerado como uno de los mejores de Europa. Casi todos han comenzado sus entrenamientos, las sensaciones de los españoles son buenas, aunque Pablo Martín y Pablo Larrazábal jugarán con otros palos. “Vengo sin palos ni maletas, nos los han perdido a la vuelta de Corea y estamos sin nada, ni siquiera tengo móvil. Me encuentro bien e ilusionado, es la primera vez que juego este campo y tengo muchas ganas, me han hablado fenomenal de él” sentencia el golfista español a la página oficial del torneo.

 

El Open de España, que repartirá 2 millones de euros en premios, se jugará a dos vueltas de 18 hoyos, pasarán el corte los 65 primeros clasificados, así como también los que queden empatados en el puesto 65. El madrileño Gonzalo Fernández Castaño es posiblemente el golfista español en mejor forma después de llevarse una victoria por año en los cuatro que lleva compitiendo en el circuito europeo. Holanda 2005, Open de Asia 2006, Italia 2007, Masters Británico 2008, y acaba de sumar tres segundos puestos, el último en Corea. Pero ojo, no se puede descartar ni a Miguel Ángel Jiménez, ni a Ignacio Garrido, ni por supuesto a Montgomerie y compañía.

 

El Open de España será visto por 400 millones de personas. Podrá verse tanto en Europa, como en Estados Unidos, Asia, Sudamérica y Sudáfrica. En España se verá a través de Teledeporte y Digital +. Cuatro jornadas, 72 hoyos, 33 españoles en acción y otros grandes golfistas internacionales;  el pronóstico para este Open de España es buen golf, muchas emociones y sobre todo, un gran espectáculo.

Con mucha ilusión, muchas ganas y muy buenas sensaciones, pero sin palos de golf y sin maletas, llegaron Pablo Martín y Pablo Larrazábal a Caldes de Malavella en Catalunya, donde se disputará a partir de este jueves el Open de España. Salieron de Corea, hicieron varias escalas y finalmente llegaron a España, no así sus herramientas de trabajo, que al parecer siguen “dando vueltas por el aeropuerto de Londres”. Otros golfistas españoles como Miguel Ángel jiménenz, atravesaron España conduciendo su coche. De su Málaga natal hasta Girona por carretera. Todo ese esfuerzo para tratar de recuperar el prestigio en una competición que a los españoles se les ha resistido los últimos siete años.

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