Bellingham no es broma: su gran actuación le da al Madrid la victoria en Almería (1-3)

Los inicios de temporada siempre son complicados por desconocer cómo estarán los rivales más que por el mero hecho de poner fin a las vacaciones. Nadie quiere volver al trabajo, salvo que seas futbolista y te dediques a una pasión real. Al Madrid, a pesar de las bajas, no se le ha hecho bola en absoluto este arranque liguero. Y ha sumado su segunda victoria consecutiva frente al Almería (1-3) gracias a los dos goles de Bellingham y al de Vinícius.

Nunca es fácil enfrentarse a los blancos, con independencia de la situación que atraviesen. En las dos últimas semanas, han perdido a dos de sus principales baluartes defensivos, Courtois y Militao. El Almería tenía en mente urdir plan que fuera efectivo para sorprender a los blancos, que contaron con Rüdiger y Lunin, jugadores poco habituales, como reemplazos. Y vaya si funcionó la estrategia. Participó todo el equipo, pero Arribas fue el verdadero protagonista.

Muchos aficionados se estaban lamentando por el calor cuando una meteórica contra del Almería acabó en un cabezazo de Arribas, que pidió perdón. Pero el daño ya estaba hecho. Aquello fue una jugada meteórica, con Ramazani corriendo por la banda como si fuera gacela. No se trataba de una carrera de 100 metros, pero se vio su velocidad a las mil maravillas.

El centro de Robertone

Robertone fue el encargado de ponerle el centro a Arribas, cuyo frentazo dejó sin respuesta a Lunin. Todos los estrenos son difíciles y no parece que el del ucraniano haya sido una excepción. El argentino se ha convertido con seis asistencias en el jugador de Primera que más ha repartido en 2023. Todavía quedan casi dos semanas de mercado y no es descabellado pensar que algún club se interese en sus servicios.

El gol le dio tranquilidad al Almería, que esperó rezagado al Madrid como el que espera un autobús con las dudas de si pasará o no. Había miedo en el equipo almeriense y ganas de que se jugara poco. Edgar y Chumi lo confirmaron con faltas que sólo recibieron la advertencia de Sánchez Martínez, sin llegar a la cartulina.

Cerca de la expulsión estuvo uno de los recogepelotas, que tardó en entregarle el balón a Carvajal en un saque de banda y fue advertido por el colegiado: "Te vas a la calle". La cara del chaval no cambió, así que es sensato pensar que quizá en el colegio acabó fuera de clase en alguna ocasión. Hay algunos que están curados de espanto.

La comodidad de Rodrygo

Vinícius se ahogó en esa posición central, sin tanta presencia en su hábitat natural, la banda izquierda. Todo lo contrario que Rodrygo, que ha encontrado su sitio como falso nueve, con facilidad para descolgarse por todo el frente de ataque. Su capacidad para asociarse es letal y, además, se ha comprobado que tiene más gol del que quizá pensábamos.

Las grandes sensaciones también las dejó Jude Bellingham, con el que es difícil no ilusionarse. Viste el número cinco y emuló a Zidane con uno de sus icónicos controles. El inglés estuvo muy activo desde la segunda línea, con desmarques perfectos para los asistentes. Y con una gran capacidad combinativa. A falta de delanteros, parece que puede solucionar el problema del gol. Fue el autor de los dos primeros tantos de los blancos y ya lleva tres en esta temporada.

El empate no estuvo exento de suspense por un posible fuera de juego que finalmente no fue tal porque el talón de Chumi habilitó a Bellingham. En este juego de rayas milimétricas, tan parecido al plano de un piso, la cara fue para el Madrid y la cruz, para el Almería. Desde el gol, los locales apenas habían aparecido en el partido.

El doblete de Bellingham

La pausa por hidratación puso a los almerienses por encima, con unos minutos sensacionales en los que tuvieron tres ocasiones consecutivas. En todas se encontraron con un Lunin seguro que no les dio la opción de anotar. Precisamente cuando casi finalizaba el descuento, Kroos marcó el 1-2, pero fue anulado por una falta previa de Carvajal.

El regreso de los vestuarios dejó un partido en el que se notó el agosto y el calor de la zona del Mediterráneo. Pero en el que el segundo gol de Bellingham fue más que suficiente para que el Madrid haya sumado su segunda victoria de la temporada (confirmada gracias al gol de Vinícius) y camine con pie firme en la Liga. Y para que Florentino Pérez mantenga su idea de que igual no hace falta un delantero.