Arengas, micros en el jugador y salir en Netflix: así es el nuevo 'bote' de 130 millones de LaLiga por televisión

Cuanto mejor es un producto, más valor tiene. Y cuanto más se impliquen los clubes en que las retransmisiones de LaLiga sean más atractivas, ellos también cobrarán más por sus derechos. Y ya no sólo porque aumente el precio de estos. La organización presidida por Javier Tebas y los equipos aprobarán en la próxima junta de división un cambio en el sistema de reparto de los ingresos audiovisuales, por el que se crea un bote de algo más de 130 millones de euros para premiar a aquellos que más colaboren con la generación de contenido para los broadcasters, tanto durante el día de partido como en el resto de la temporada.

El importe, calculado por 2Playbook a partir del dinero repartido en 2021-2022 saldrá del 25% del reparto audiovisual que se determina en función de lo que se denomina implantación social, un indicador que pondera factores como la recaudación media por abonos y taquilla, las audiencias televisivas y el seguimiento en redes sociales. Ahora, un tercio de ese dinero se designará en función de cómo se apoye la mejora de las retransmisiones. El otro 75% se continuará repartiendo por los mismos criterios que estableció el Gobierno en 2015, que son a partes iguales (50%) y en función del rendimiento deportivo (25%), siempre preservando que FC Barcelona y Real Madrid no reciben menos de los 140 millones que cobraban antes de la comercialización conjunta.

El cambio se ha ido explicando estos días a todos los clubes que competirán en 2023-2024 y se pormenorizaron los detalles en las juntas de división, de modo que los presidentes puedan dar la luz verde definitiva en la junta de división que normalmente se celebra en agosto, justo antes del inicio de la competición. La sensación general es que es un cambio necesario que ayudará a seguir alimentando el negocio.

“Esto nos sitúa en otra dimensión”, admite el responsable de medios de un equipo habitual en competiciones europeas. "Vamos a hacer todo lo posible por conseguir la máxima puntuación", anticipa otro, sobre el convencimiento de su club en el salto que pueden dar las retransmisiones. "Ahora por fin también tenemos argumentos económicos para que dirección deportiva, entrenador y jugadores entiendan la importancia de facilitar el acceso de las televisiones”" confía un director general.

LaLiga busca que los clubes se involucren para incrementar el valor del producto

En esas reuniones se ha entregado a las entidades el sistema de puntuación que se usará para crear el ranking a partir del cual se distribuirá el dinero. Se desconoce si hay importes mínimos o máximos a percibir por esta particular maratón de acciones que también incluyen pre y post partido. Hacer pleno supondría lograr 500 puntos a través de las más de treinta acciones recogidas, a las cuales ha tenido acceso este medio. Y, para optar al dinero, al menos se tendrán que conseguir 175 puntos.

En el listado hay cuestiones que afectan al día de partido, pero también incentivos para ir más allá. Por ejemplo, ofrecer el contenido que pidan LaLiga y los broadcasters en los denominados Club Video Day (22 puntos) y los Media Days (16 puntos), que permiten contar con imágenes de recurso e historias para confeccionar la programación de toda la temporada. Si en estas sesiones se da un paso más y se facilitan tests personales, entrevistas en profundidad o retos de habilidades con los jugadores, habrá un bonus de 16 puntos en total.

Si, además, participan en producciones o coproducciones de LaLiga como la que se está realizando con Netflix o en campañas promocionales de las teles, recibirán hasta 8 y 10 puntos, respectivamente. Ahí se incluye desde envío de comunicaciones a las bases de datos sobre disponibilidad de un partido en Dazn o Movistar+, hasta cesión de espacios para montar fan zones o presencia de jugadores en tiendas del operador para la firma de autógrafos.

A partir de aquí ya se entra en materia de matchday, pero con algunas novedades para acercar al futbolista al fan y con una alta puntuación si se cumple durante todo el curso. Toda una revolución en España. Por ejemplo, los equipos recibirán un punto por partido, hasta un máximo de 38, si permiten que las cámaras graben 30 segundos dentro del vestuario entre el calentamiento y el inicio del choque; si esas imágenes incluyen la arenga de los jugadores, puntuará doble hasta un máximo de diez puntos para toda la temporada.

También valdrá dos puntos, hasta un máximo de ocho, que se facilite que un jugador porte micrófono o cámara en el calentamiento, celebraciones de títulos, clasificaciones europeas, o que se dejen entrevistar a su llegada al estadio… Si lo hacen a pie de campo, serán otros ocho puntos, e incluso se incentiva la presencia de micrófonos en las pausas de hidratación, durante un máximo de 20 segundos, como ya hacen ACB o Euroliga, e incluso entrevistas con jugador o entrenador al término de la primera parte.

"No nos están pidiendo nada que no estemos viendo ya en la NBA o la Premier League", defiende un club. De hecho, en otras competiciones ya se aplican cuestiones que pronto podríamos ver en LaLiga, como grabar 30 segundos al final del partido dentro del vestuario del equipo ganador, entrevistas de no más de un minuto dentro del vestuario adicionalmente a las ya estipuladas, emisión en directo o grabación desde el interior en una celebración de título o salvación… "Aporta frescura y valor añadido", sostienen desde la organización que preside Javier Tebas.

Ahora bien, asumiendo que habrá reticencias por parte de algunos, lo que la dirección ha tratado de hacer es que nadie se quede fuera de este reparto, de modo que la nota de corte se puede pasar únicamente cumpliendo lo que ya marca el actual reglamento. Ahí están las entrevistas con jugadores y entrenadores, denominadas como Flash y Superflash, se realizan correctamente para LaLiga y las teles con derechos. Ahí se juegan 50 puntos que sólo se consiguen si, al término del curso, se ha cumplido en 36 de los 38 partidos, con opción a puntos extra si los clubes acuerdan entrevistas conjuntas en el caso de los entrenadores. Y podrían sumar 40 puntos más si los paneles de publicidad que se colocan tras los protagonistas -sea en esas entrevistas, sala de prensa o zona mixta- cumplen lo marcado y también muestran el logo de LaLiga, Movistar+ y Dazn, en este caso.

Otros 40 puntos serán por facilitar una correcta grabación de equipaciones, llegadas, inspección de campo, calentamiento y túnel, conforme a lo solicitado. Y otros 38 puntos, respectivamente, están asegurados si la entrevista prepartido la concede el primer entrenador y no un ayudante, como ya se exige en Premier League y Champions League, así como si se facilitan entrevistas institucionales en la previa del partido con directores deportivos o jugadores no convocados.

Cuánto mueve la televisión y cómo se reparte el dinero

Todas estas mejoras van encaminadas a mantener la recuperación de las audiencias que se inició tras la pandemia, aunque también gozando de contenido adicional para generar impactos durante el resto de la semana, donde el ecosistema de LaLiga ya ha superado los 200 millones de seguidores. En términos de audiencias, en España y únicamente en lo que a televisión se refiere había repuntado un 0,5% hasta la jornada 34 en Primera División, hasta 240 millones de telespectadores, y la previsión es de un avance muy superior al término del curso ante todas las plazas europeas y de descenso que se definieron en el tramo final.

En el caso de Segunda, la presencia de equipos históricos y el mayor atractivo adquirido le permitió mejorar un 15% hasta la jornada 40, con 26,1 millones de telespectadores. En total, las dos categorías operadas por LaLiga están ya sólo 10,4 millones de audiencias acumulada por debajo de los registros de 2017-2018, cuando Movistar+ ofrecía ocho paquetes por jornada en su paquete básico.

Traducido en negocio, los ingresos en España por televisión ascienden ya a 1.194 millones de euros anuales, frente a los 1.023 millones de aquel ciclo antes mencionado o los apenas 600 millones que se generaban antes de la venta conjunta de los derechos. En el ámbito internacional, donde Mediapro ha sido renovada como agencia, se ha pasado de 260 millones en 2014-2015 a una previsión de 835 millones de euros anuales.

*Artículo publicado orginalmente en 2Playbook.com.