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Cómo Ansu Fati se echa a un gris Barcelona a la espalda con tan solo 16 años
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Se estrenó como goleador

Cómo Ansu Fati se echa a un gris Barcelona a la espalda con tan solo 16 años

El jovencísimo futbolista ayudó a su equipo en un momento particularmente difícil para los culés, que no encontraban situaciones de remate. Los de Ernesto Valverde se dejaron dos puntos

Foto: Ansu Fati observa como su remate de cabeza entra en la portería de Osasuna. (EFE)
Ansu Fati observa como su remate de cabeza entra en la portería de Osasuna. (EFE)

Ansu Fati fue el segundo jugador más joven en debutar en Liga con la camiseta del Barcelona la pasada semana contra el Betis y este sábado se ha convertido en el primero en ver puerta con tan solo 16 años de edad. Increíble, pero cierto. El jugador, que hace poco pedía a gritos una oportunidad en el Barça B tras una excelente pretemporada a las órdenes de García Pimienta, técnico del filial, ha derribado todas las puertas imaginables y ya salva al primer equipo de la quema total. Fue lo más destacable en un Barcelona gris que se dejó dos puntos contra un gran Osasuna que incluso llegó a desesperarle. (2-2).

Ansu Fati es un juvenil que, por lo visto en los dos últimos partidos, compite como un veterano. Su salida en el segundo tiempo, en detrimento de Semedo, revolucionó al equipo. Suyo fue el gol del empate que hizo respirar a un Barça sin claridad de ideas durante los 45 minutos iniciales. Arthur adelantó a los azulgranas más tarde, pero un inocente penalti de Piqué echó por tierra la remontada. Los culés siguen sin carburar, con un centro del campo muy espeso y una defensa frágil que pecó de pardilla en algunos tramos del partido, como en el primer tanto de Roberto Torres en el que Sergi Roberto no acudió a la ayuda con Semedo, a la postre el gran damnificado.

Sin Messi ni Suárez, de nuevo convalecientes, y con Griezmann muy vigilado por los centrales navarros, Ansu Fati fue la mecha que encendió al Barcelona. Todos los focos recayeron sobre el bisauguineano en cuanto pisó el césped en el segundo tiempo. Ernesto Valverde confía en él, en su excelente estado de forma e ilusión, y le mandó a calentar por delante del resto del banquillo blaugrana. Que el joven futbolista tendría minutos parecía claro, pero no toda una segunda parte. El 'Txingurrí' sentó a Semedo y le dio galones en busca de mayor profundidad por la banda izquierda, la que en teoría ocuparía Neymar. Rafinha retrasó su posición al centro del campo para que la promesa en ciernes disfrutara de espacios y aprovechara toda su velocidad.

placeholder Los jugadores del Barcelona felicitan a Ansu Fati por su gol ante Osasuna. (EFE)
Los jugadores del Barcelona felicitan a Ansu Fati por su gol ante Osasuna. (EFE)

El primer balón que toco acabó en la red. Otro canterano de lujo, Carles Pérez, vio su carrera hacia el centro del área y le puso un centro perfecto. Ansu Fati se adelantó a Nacho Vidal, que no le vio llegar, y saltó con potencia y decisión para cruzar con la testa la pelota al palo derecho de la portería defendida por Rubén Martínez. Fue un golazo espectacular, más allá del punto de penalti, que dejó con la boca abierta a todo El Sadar. Valverde, que normalmente se contiene en las celebraciones, no ocultó su cara de asombro. El campo de Osasuna suele ser una caldera que asusta hasta al jugón más experimentado, pero no a Ansu Fati, que despertó a los azulgranas. Su partido, eso sí, no tuvo final feliz porque en el tramo final Roberto Torres (una vez más) se encargó de poner las tablas definitivas en el marcador tras aprovechar unas desafortunadas manos de Piqué en el área. El Barcelona ya ha tirado por la borda cinco puntos en tres jornadas de la presente Liga cuando el curso pasado a estas alturas era líder con pleno de triunfos. Las bajas de sus dos jugadores estrellas, más la ausencia por cuestiones de mercado de Rakitic, pesan.

La Masía está de moda

Como decimos, la irrupción en la Liga de Ansu Fati es la nota positiva de este confuso inicio culé en el campeonato doméstico. A su eléctrica actuación contra el Betis, muy lejos el Barça de aquella imagen coral que vimos ante los andaluces, le suma ahora una buena segunda parte en Navarra y un golazo que recordará el resto de su vida. Messi ya le bendijo el fin de semana pasado con un sincero abrazo que posteriormente publicó en su cuenta de Instagram. El argentino, como ya se sabe, es un fiel defensor de la cantera y la realidad es que el el bisauguineano, junto a Carles Pérez, al que es imposible apartar de esta ecuación, ha vuelto a desviar la atención hacia La Masía, un tanto denostada por la actual junta directiva, que sigue con los ojos puestos en el mercado para una posición, la delantera, bien cubierta.

Lejos de quedarse solo en el gol, Ansu Fati ha sembrado la preocupación en la defensa de Osasuna y ha estado muy cerca de provocar un penalti en los últimos minutos que hubiera cambiado el signo del encuentro. La Federación Española le sigue desde hace tiempo por sus buenas actuaciones, concretamente desde la pasada edición de la Youth League. El joven futbolista quiere jugar con España y a los responsables de las inferiores les encantaría tenerlo disponible para el próximo Mundial sub17 que se celebrará en Brasil en octubre. Antes, su padre debe obtener la nacionalidad, circunstancia que le falicitaría el pasaporte nacional al blaugrana por ser menor de edad. Ansu Fati lleva desde los seis años residiendo en nuestro país y por su cabeza no pasa otra cosa que no sea defender los colores de 'la Roja'.

A pesar de su excelente rendimiento, lo lógico es que la nueva perla del equipo vea reducida su participación en cuanto Messi y Suárez estén disponibles. Su presente más inmediato pasa por rodarse en el Barça B y en la difícil y siempre física tercera categoría del fútbol español. Eso sí, el técnico extremeño vigilará sus pasos de cerca y contará con él en los entrenamientos del primer equipo. Hasta que eso llegue, posiblemente tras la vuelta del parón de selecciones, Ansu Fati podrá presumir de haber rescatado al Barcelona de un resultado mucho peor.

Ansu Fati fue el segundo jugador más joven en debutar en Liga con la camiseta del Barcelona la pasada semana contra el Betis y este sábado se ha convertido en el primero en ver puerta con tan solo 16 años de edad. Increíble, pero cierto. El jugador, que hace poco pedía a gritos una oportunidad en el Barça B tras una excelente pretemporada a las órdenes de García Pimienta, técnico del filial, ha derribado todas las puertas imaginables y ya salva al primer equipo de la quema total. Fue lo más destacable en un Barcelona gris que se dejó dos puntos contra un gran Osasuna que incluso llegó a desesperarle. (2-2).

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