Lío en el Athletic por Youssuf Diarra, un canterano 'vasco' nacido en Bamako (Mali)
El conjunto vasco es uno de los equipos más importantes de nuestro país, especialmente por las tradiciones que mantiene pese a los años y que, ahora, quedan en el punto de mira
El Athletic Club puede presumir de ser uno de los clubes más coherentes del fútbol español. Con una filosofía muy particular, a día de hoy puede presumir de ser uno de los tres equipos nacionales que nunca ha bajado de categoría e, incluso, en los últimos años ha sido capaz de conseguir estar a primer nivel y luchando por títulos gracias a su fútbol atractivo y de ataque. Pero, ahora, el fichaje de un joven jugador podría poner en duda esa idiosincrasia centenaria.
Durante el pasado mes de febrero, el conjunto vasco realizó unas pruebas en Lezama con una serie de jugadores que interesaban al Athletic. Entre ellos, se encontraba un joven de 19 años que, esta temporada, ha firmado unos espectaculares números en Tercera. Youssuf Diarra, mediapunta del Txantrea, ha anotado 15 goles en los 33 partidos que ha jugado este curso. ¿El problema? Se trata de un jugador nacido en Bamako (Mali) y que llegó a Navarra hace dos años.
Tradicionalmente, el ideario del Athletic es claro: sólo cuenta con jugadores que sean nacidos en el País Vasco -o Navarra- o que se hayan formado deportivamente en la cantera vasca. Y, en el caso de Diarra, las dudas que le nacen a una parte de la afición vienen precisamente por ahí: evidentemente, nació a muchos kilómetros de distancia de Bilbao y parece que tampoco se ha formado en la zona, pues no aterrizó a Navarra hasta que ya tenía los 17 años cumplidos.
*FOTO: Youssuf Diarra, durante las pruebas con el Athletic
De hecho, Diarra sí se ha criado deportivamente en España, pero no en el País Vasco. Tras nacer en África, a los 8 años llegó a nuestro país después de que a sus padres les saliera trabajo en una granja en Lleida. Desde pequeño, su pasión por el fútbol le hizo pasar por varios de la ciudad, hasta fichar por las categorías inferiores de la UE Lleida, con el que llegó a jugar en juveniles y que le hizo ser convocado con su selección para el Mundial sub 17, pero una lesión le impidió jugar.
Sería en el propio conjunto catalán en el que decidiría dar el paso en dirección a Navarra, donde varias personas de confianza le recomendaron marcharse para seguir formándose en lo deportivo y en lo personal. Una vez allí, firmó por el Ardoi para, un año después, hacer lo propio por el Txantrea. Esos dos años en Navarra, donde ha empezado a brillar en el terreno de juego, son su única formación en el fútbol base de la zona y a lo que se agarra el Athletic.
*VÍDEO: Iñaki Williams, un caso que no tiene comparación
Su destino sería el Basconia
En caso de cerrarse el fichaje, todo indica que la idea del Athletic es que pase a formar parte del Basconia, tercer equipo del club para, con el paso de los años -o, incluso de los partidos si encajara bien- dar el salto al filial, el Bilbao Athletic. Pero la polémica nace precisamente por su procedencia, al entender algunos aficionados que en el caso de Diarra no se cumplen los preceptos por los que se han regido los fichajes del club a lo largo de toda su historia.
Pese a ser un jugador de raza negra, poco o nada se parece su caso al de Iñaki Williams. De padre ghanés y de madre liberiana, el actual delantero del Athletic sí nació en Bilbao, además de criarse deportivamente en Lezama, como es el caso de su hermano Nico, que juega en las categorías inferiores del club vasco. Ahora, el caso de Youssuf Diarra ha generado polémica, pues podría romper la histórica filosofía a la que se ciñe el Athletic desde siempre.
El Athletic Club puede presumir de ser uno de los clubes más coherentes del fútbol español. Con una filosofía muy particular, a día de hoy puede presumir de ser uno de los tres equipos nacionales que nunca ha bajado de categoría e, incluso, en los últimos años ha sido capaz de conseguir estar a primer nivel y luchando por títulos gracias a su fútbol atractivo y de ataque. Pero, ahora, el fichaje de un joven jugador podría poner en duda esa idiosincrasia centenaria.