Messi gana, desde el martes, 22,5 millones de euros netos por temporada

Cincuenta millones por temporada. Ese es el dinero que Leo Messi costará al Barcelona con el nuevo contrato que el pasado martes entró en vigor y que dejó satisfecho a medias al punta argentino, tal y como declaró minutos después de rubricar el nuevo acuerdo. “Quiero seguir muchos años, pero si soy un problema me marcharé”. Messi consiguió lo que buscaba. Quería ganar más que nadie y lo ha logrado. La llegada de Neymar y esos 17 millones de euros alteraron el orden establecido y hasta que el argentino no recibió lo que quería, la situación no volvió a estar bajo control. Los 22,5 millones de euros que el cuatro veces Balón de Oro va a percibir limpios de polvo y paja cada año tienen la culpa.

Josep María Bartomeu habló ayer de Messi y del futuro del argentino. El rumor de una posible operación estaba en la calle. El presidente quiso terminar con esas voces que ponen en duda que el músculo financiero de la entidad azulgrana pudiera aguantar el pago de esos 50 millones de euros por campaña, más los casi 40 de Neymar... hasta acercarse a los 300 millones de euros de coste en salarios de la plantilla más cara del fútbol mundial.

Messi quería ser el mejor pagado y lo consiguió con ese contrato sin igual que firmó el pasado mes de mayo. No hay comparación posible con el de ningún jugador de fútbol. Días atrás normalizó su relación con Hacienda mediante el pago de 35 millones de euros, correspondientes a las declaraciones del IRPF y a los derechos de imagen los últimos años. La tributación de la renta en Cataluña se encuentra en el 56%. El argentino quería pasar página a raíz de los expedientes abiertos, pero todavía tiene pendiente la diligencia de la Agencia Tributaria y que pretende hacer caso omiso del ministerio fiscal que quiere exculpar al jugador.

El argentino quería recuperar esa jerarquía de mando que perdió con la llegada de Neymar. El dinero pesa mucho en un vestuario y el aluvión de cifras que se manejaban desde la llegada del brasileño inquietó al delantero, que veía como había perdido esa condición que según él su fútbol reclama y exige. Bartomeu sabe que su proyecto pasa en gran parte por volver a tener en el equipo a un Messi motivado, con ganas y queriendo demostrar que puede volver a ser el jugador determinante de meses atrás. Por este motivo, el presidente ha arriesgado con un contrato sin igual en el mundo del fútbol y con alto coste económico, excesivo según los expertos en balances y números.

El adiós de jugadores como Valdés, Puyol o el presumible de Xavi, supone un ahorro de cerca de 40 millones brutos para la entidad azulgrana, cantidad que no alcanza a esos 50 millones de euros que cada temporada en el Camp Nou costará Leo Messi. Por este motivo y pese a que ayer el presidente hablara feliz de la posible continuidad de Xavi, es consciente que necesita descargar la plantilla de sueldos elevados y el ahora mismo primer capitán es, tras Messi y Neymar, el sueldo más alto del plantel. Por el Bernabéu siguen atentos a todos los movimientos. Algunos se frotan las manos y piensan que el club azulgrana no podrá aguantar este ritmo en cuando a sueldos. No auguran mucho futuro a una convivencia entre los sueldos de Messi, Neymar y el del que está en camino, ya sea Luis Suárez o Higuaín. Y es que el uruguayo ya gana ocho millones en el Liverpool.