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El Madrid ya está listo para la gran batalla que le espera en Múnich frente al Bayern
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SUEÑA CON LA LIGA ANTE UN DÉBIL OSASUNA

El Madrid ya está listo para la gran batalla que le espera en Múnich frente al Bayern

El Real Madrid, a partir del primer gol de Cristiano a Osasuna, no dudó de la conquista de tres puntos para seguir apretando al Atlético en la tabla (4-0)

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Un gol a los seis minutos de Cristiano Ronaldo anestesió y sentenció un partido en el que Liga y descenso estaban en juego. El Real Madrid, a partir de ese tanto, se sabía dominador de la situación, no dudaba de la conquista de tres nuevos puntos para seguir apretando al Atlético en la clasificación. Mientras, Osasuna transmitía la sensación de poder hacer poco o nada en la desigual pelea. Tanta diferencia existía entre la actitud y aptitud de unos y otros que el partido terminó en goleada (4-0) tras el doblete de CR7, el tanto de Sergio Ramos y la culminación de Carvajal.

El Real Madrid sólo hizo que recibir buenas noticias durante el partido. Cristiano Ronaldo mostró que su recuperación física es un hecho pese a un golpe que sufrió mediada la primera mitad. El portugués volvió a ver puerta por partida doble en esa carrera que mantiene por el ‘Pichichi’, algo que servirá para elevar la moral de un delantero que vive de su constante exposición, de estar en la primera línea de fuego. Eso del banquillo no va con él y aunque arriesgue siempre quiere estar sobre el terreno de juego.

Las otras noticias llegaron con la aparente feliz recuperación de Marcelo y la positiva respuesta de los no habituales Varane, Nacho y Morata. El primero parece que ya ha olvidado las molestias de su rodilla operada, mientras que los dos canteranos cumplen y de sobra con su presencia en el equipo titular. Uno solventó los pocos apuros en los que metió Osasuna al Real Madrid y el otro peleó y buscó el gol como es su costumbre.

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El gol de Cristiano, en posición dudosa, lo tapó todo en la primera parte. Tras una ligera reacción de Osasuna con llegadas de Armenteros y Cejudo, el partido se convirtió en un monólogo a cámara lenta, sin apenas velocidad y cuando llegaba ésta, aparecían los problemas con hasta tres ocasiones de Sergio Ramos que buscaba el gol en complicidad con Cristiano. El luso sólo tenía ojos para busca el remate del central, indicándole incluso cómo tenía que colocar el cuerpo en una de las ocasiones.

El partido se movía entre la comodidad y la tranquilidad para el Real Madrid. De esta manera, Marcelo y Nacho se convirtieron en extremos durante toda la primera mitad. Llegaban como querían, sin oposición alguna. Incluso uno y otro tuvieron sendas ocasiones para batir a un buen Andrés Fernández que, pese a sus buenas paradas, se terminó marchando goleado del Bernabéu. Y es que Osasuna dejó una imagen muy triste en su paso por el estadio madridista.

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El descanso sirvió para que el Real Madrid regresara hasta más metido en el partido, con más ganas de sumar goles y de divertir a la afición. El segundo gol de Cristiano llegó con otro golpeo de larga distancia que terminó en el fondo de la portería tras una nueva extraña trayectoria, como sucedió en el primer gol.

Ramos quería el gol. Buscaba dedicárselo al bebé que nacerá en mayo y lo terminó consiguiendo. El partido daba para alegrías así y el capitán pudo adornarse tras un buen pase de Di María. Ya con el marcador contundente y completamente cerrado, Ancelotti decidió administrar minutos quitando a Cristiano, Di María y Modric, futbolistas que deberán jugar un papel importante el próximo martes en Múnich.

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Tanto permitía el choque que Carvajal terminó jugando de extremo, pisando el área contraria con sentido y con peligro. Isco quería que su compañero y amigo marcara. Tal fue su empeño que asistió al portador de la primera piedra de Valdebebas a siete del final, un gol que sirvió para dejar patente que este Osasuna lo va a pasar mal en la lucha en la que está inmerso por mantenerse con vida en Primera.

El Real Madrid llega al partido decisivo de la temporada repleto de moral, sin jugadores tocados a la espera de Bale y con la confianza que dan tres nuevos puntos y la posibilidad de seguir luchando por la Liga. Así lo dice la matemática y el estado de ánimo de la plantilla.

Ficha técnica

Real Madrid: Diego López; Nacho, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Illarramendi, Modric (Xabi Alonso, m.67), Isco; Di María (Carvajal, m.74), Cristiano Ronaldo (Casemiro, m.61) y Morata.

Osasuna: Andrés Fernández; Damiá, Flaño, Arribas, Joan Oriol; Cejudo, Raoul Loé (Oier, m.58), Puñal, Armenteros (Lobato, m.78), De las Cuevas; y Oriol Riera (Acuña, m.64).

Goles: 1-0, m.6: Cristiano Ronaldo. 2-0, m.53: Cristiano Ronaldo. 3-0, m.60: Sergio Ramos. 4-0, m.84: Carvajal.

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro). No mostró cartulinas.

Incidencias: encuentro correspondiente a la 35a jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante la presencia de 69.854.000 espectadores. Se guardó un emotivo y respetuoso minuto de silencio en memoria de Tito Vilanova. La plantilla madridista dedicó la Copa del Rey a su afición.

Un gol a los seis minutos de Cristiano Ronaldo anestesió y sentenció un partido en el que Liga y descenso estaban en juego. El Real Madrid, a partir de ese tanto, se sabía dominador de la situación, no dudaba de la conquista de tres nuevos puntos para seguir apretando al Atlético en la clasificación. Mientras, Osasuna transmitía la sensación de poder hacer poco o nada en la desigual pelea. Tanta diferencia existía entre la actitud y aptitud de unos y otros que el partido terminó en goleada (4-0) tras el doblete de CR7, el tanto de Sergio Ramos y la culminación de Carvajal.

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