Las dudas de Martino sobre su continuidad en el Barcelona siguen aumentando

El ‘Tata’ Martino duda. Todo lo que rodea al Barcelona, en una temporada complicada, le sigue sorprendiendo. Nada es sencillo por el Camp Nou, pero el cambio de presidente y todos los movimientos que se están produciendo alrededor del club azulgrana no permiten que el técnico tenga esa tranquilidad necesaria para desarrollar su trabajo y que todavía no ha encontrado en el Barcelona desde su llegada allá por el mes de agosto.

El entrenador argentino tiene claro que la fecha para examinar su comportamiento y, en especial, su futuro en el equipo barcelonista será el 25 de mayo, momento en el que la temporada echará el telón a falta del Mundial de Brasil. Según ha confesado a su círculo la decisión de no continuar, de no apurar el año que le resta de contrato.

Tal y como informó El Confidencial semanas atrás, su deseo es emprender una nueva aventura, dando por cumplida su experiencia en el Barcelona con un año. Así pensaba en el paréntesis navideño o por lo menos esos fueron los mensajes que dejó en Argentina durante las vacaciones. Tenía la sensación de no haber llegado en el momento adecuado a un club de una tremenda dimensión.

Mes y medio después, la situación no ha cambiado. El adiós de Rosell, la polémica suscitada alrededor de Neymar, el incierto futuro de la entidad, los cambios estratégicos que está sufriendo la entidad y la distancia que sigue manteniendo con la plantilla son los factores que pesan más a la hora de tomar una decisión.

"Mi examen llegará con los resultados", afirmó días atrás intentando explicar su negativa a negociar una posible ampliación de contrato en la que pensó el nuevo presidente Bartomeu. "No necesito apoyos en estos momentos. Me siento respaldado", comentó al respecto, negando la posibilidad de sentarse a hablar con el nuevo presidente para sellar la ampliación del contrato. Es más, la filtración fue considerada como una maniobra interesada y lanzada por el club sin fundamento.

Lo que más le preocupa al técnico argentino es la respuesta de sus jugadores. Intenta aislarse de todo lo que sucede en el club y del temido y respetado entorno azulgrana. El equipo, que ha dado claros síntomas de mejora en los dos últimos partidos, no se identifica con el técnico. A algunos de los pesos pesados les sigue pareciendo un disparate eso del juego directo y de utilizar el contragolpe. Xavi negó el domingo pasado que algunos de los últimos goles de su equipo hayan llegado de esa manera.