Hoy queda sin castigo el dedo en el ojo de Mourinho a Vilanova y su colleja al portugués

'Medida de gracia', así le gusta que se diga a Ángel María Villar lo que todo el mundo llama indulto y que es la decisión que adopta el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) en el año en el que ha sido reelegido y por la que todos los sancionados dejan de estarlo en el día que se celebra la Asamblea del fútbol. En este caso, hoy al mediodía. El Consejo Superior de Deportes (CSD) por medio de Miguel Cardenal, su presidente, ha dado el visto bueno al perdón por lo que José Mourinho y Tito Vilanova se podrán sentar en el banquillo en el partido de ida de la Supercopa que se celebrará en el Camp Nou el 22 del mes que viene.

La sanción que ambos técnicos recibieron a raíz de todo lo sucedido el pasado 17 de agosto ha quedado sin efecto. El famoso dedo del portugués en el ojo del en ese momento segundo de Guardiola y la posterior colleja de éste, han quedado sin castigo alguno. De igual manera, David Villa, Mesut Özil y Marcelo, expulsados ese día en la 'pelea' que se formó ese día tras la entrada del lateral brasileño a Cesc, tampoco tendrán que cumplir partido alguno de sanción.

La medida, pese a lo habitual, no ha gustado a Sandro Rosell que ha pedido públicamente que Villar diera un paso atrás y no deje sin castigo lo hecho por Mourinho en el partido de vuelta de la Supercopa. Hoy, tendrá ocasión de ratificarlo en la Asamblea, día en el que todo hace indicar que estrenará su cargo de directivo de la RFEF, algo que todavía no ha hecho en los 18 meses que lleva como directivo de la Federación. Ni las presiones llegadas desde Barcelona han hecho cambiar de idea a Villar que adopta el perdón con independencia de los castigados. Tan sólo en una ocasión el CSD negó el indulto. En esta ocasión, Cardenal está conforme.

Partidos a las once de la noche y la Supercopa no se mueve

La Asamblea servirá para marcar el calendario que se iniciará el próximo 18 de agosto con dos jornadas en el citado mes y en las que los partidos se jugarán a las siete, nueve y once de la noche, fútbol de madrugada. Si la petición de Mediapro es atendida, los clásicos entre Real Madrid y Barcelona no irán tan al final del calendario. La operadora televisiva pretende que estén en la mitad de cada una de las dos vueltas con el fin de que no resten interés a las jornadas finales, tal y como sucedió en la pasada campaña tras el triunfo del equipo blanco en el Camp Nou, sentencia de Liga incluida.

Otro tema que iba a ser estrella y que ha quedado en nada ha sido el del acuerdo que anunció la propia RFEF para jugar a partir de la temporada 2013-2014 la Supercopa en Pekín en cinco de las siete próximas ediciones a cambio de 40 millones de euros. La oposición de los clubes, especialmente de los dos grandes, ha terminado con la iniciativa que siempre estaba supeditada a la aprobación en la Asamblea. Al final, no figurará en el orden del día de la Asamblea.