Inglaterra calca el plan de Portugal 2016 y de Francia 2018: así quieren salir campeones

"No es la Inglaterra que merecemos, pero sí la que necesitamos", debería pensar Gareth Southgate tras eliminar a Ucrania por un contundente 0-4. La selección inglesa ha llevado a esta Eurocopa la generación más talentosa en décadas. Probablemente, tan solo Portugal y Francia podían presentar una nómina de atacantes tan estimulante al inicio del torneo. Las dos ya están en casa. Mientras que Inglaterra está a un paso de colarse en una final de Eurocopa por primera vez en su historia. ¿Nos está divirtiendo por el camino? Siguiente pregunta. Inglaterra no enamora, pero gana. Inglaterra no despliega un fútbol eléctrico en ataque, pero le basta con apoyarse en la dupla Sterling-Kane para ir superando obstáculos. Inglaterra no es la que podríamos esperar, pero Southgate tiene un plan que no para de dar frutos maduros. Y ese es su gran mérito.

Los 'Three Lions' ostentan el honor de ser el único conjunto en semifinales que no ha encajado ni un solo gol. Nadie nunca había encajado tan poco. Y eso que se han cruzado con Croacia, República Checa o Alemania por el camino. No es una casualidad, sino la consecuencia directa de haber emulado el modelo que hizo campeona a la Portugal de Fernando Santos en la Eurocopa de 2016 y a la Francia de Didier Deschamps en el Mundial de 2018.

Antes la seguridad defensiva y el rigor sin pelota que el destape ofensivo. Antes asestar golpes mortales a través del balón parado con el colosal Harry Maguire y el letal Harry Kane que crear automatismos con balón en la pizarra. Aunque eso suponga depender de la inspiración individual del correoso Sterling y del desequilibrio de Jack Grealish en los pocos minutos que ha disputado. La defensa prima por encima del resto de aspectos.

De hecho, la selección inglesa es el 22º equipo en disparos realizados por encuentro (7,4) y el 8º en regates completados por encuentro (8.8.) según el portal de datos Whoscored. Francia fue el 15º equipo en disparos a puerta en el Mundial (11,6) y Portugal el 5º en el mismo registro (17.6) en la Euro de 2016. A diferencia de ellos dos, Inglaterra aún no ha encajado, mientras que Francia concedió seis goles en siete partidos y Portugal, cinco goles en siete partidos.

Inglaterra basa su éxito en la defensa

No vamos a engañar a nadie a estas alturas de la película. Inglaterra juega a que sucedan pocas cosas y controlar el encuentro por encima de todo. Por eso se blinda con un doble pivote intocable formado por Declan Rice y Kalvin Phillips que ayuda siempre a la defensa. Del mismo modo que su posesión es conservadora, toma pocos riesgos, busca progresar por fuera y muy pocas veces por dentro para forzar al rival a contragolpear por los carriles exteriores y siempre llega a defender con superioridad numérica su área gracias a un veloz repliegue.

Además, el técnico inglés sabe que sus atacantes pueden decidir partidos por sí mismos. Kane, Sterling, Grealish, Sancho, Rashford, Foden, Mount y Saka. Si el equipo titular no responde, Southgate puede tirar de fondo de banquillo para cambiar por completo la dinámica de los encuentros. Como hizo con Grealish ante Alemania. Hay múltiples alternativas, revulsivos de primer nivel y mucho gol. "Sabe exactamente qué necesita la gente y qué necesitan los jugadores. Siento que entiende qué es lo mejor para Inglaterra por la experiencia que ha tenido en la Copa del Mundo y en grandes torneos. El grupo está muy unido, algo que no había experimentado en mucho tiempo", confesaba el lateral Luke Shaw.

Ante Croacia, Inglaterra buscó el tanto de la victoria al inicio de cada parte sin desmadrarse. Se lo encontró cuando menos se lo esperaba y Croacia estaba dominando. Ante Escocia nos mataron de sopor. Ante República Checa se encontraron un gol tempranero y luego se limitaron a mantener la ventaja y esperar una oportunidad al contragolpe. Ante Alemania, Souhtgate copió el dibujo germano y ninguno de los dos asumió riesgos. Pero entonces Grealish entró para jugar los últimos 20 minutos y voló por los aires el sistema defensivo germano. Ante Ucrania, Inglaterra dominó prácticamente todo el partido ante una selección que ya había tocado su techo competitivo. Y de paso recuperó la mejor versión de su capitán, Harry Kane. Todo sale a pedir de boca para Southgate.

En el primer partido que jugó Inglaterra fuera de casa en toda la Eurocopa, el público de Roma pudo comprobar la puntualidad goleadora del combinado inglés que consiguió tantos goles como en el resto de la Eurocopa (4). Desde el tanto en el minuto 4 de Kane para encarrilar el encuentro hasta el de Maguire en el 46. Ucrania se quedó sin respuesta frente a una selección inglesa que parecía estar muy por encima de ese partido. Southgate aisló a los laterales ucranianos y dibujó el ecosistema adecuado para que, tanto Sancho como Sterling, disfrutasen de situaciones de 1vs.1. Ahora, los ingleses volverán a Wembley donde ya espera Dinamarca. El mejor rival con el que se han topado en el campeonato.