Los sustitutos de los Ultras Sur mostraron su repulsa a la violencia

Dos días después de los trágicos incidentes que se vivieron en los aledaños del Vicente Calderón y en medio de la investigación de lo sucedido, ha llegado la Copa del Rey. El Real Madrid recibía en el Santiago Bernabéu al Cornellà con el colchón de goles cosechado en la ida (4-1), ventaja que convertía el partido de vuelta en un mero trámite. Bien es cierto que el espectáculo estaba sobre el terreno de juego, allí donde se despliega el fútbol, pero las gradas del feudo madridista también tuvieron su cota de protagonismo. La Grada de Animación desplegó una pancarta en contra de la violencia que ha sacudido el fútbol español en los últimos días.

Las muestras de repulsa se han repetido en diferentes estadios desde que el domingo pasado Francisco Javier Romero Taboada, 'Jimmy', perdiera la vida. Este martes, en el tercer anfiteatro del Santiago Bernabéu se desplegó una gran pancarta con el siguiente mensaje: “Ni violencia, ni racismo. Un solo sentimiento: Madrid y nada más”. Todo apunta a que la acción de protesta fue una iniciativa que partió Grada de Animación, grupo que nació después de que el Real Madrid diera por terminada la etapa de Ultras Sur.

Hay que recordar que el club madridista procedió a la “reorganización completa de la Grada de Animación del fondo sur del Santiago Bernabéu”. La intención del Real Madrid era que cualquier socio solicitase la pertenencia a dicha grada aunque este espacio sólo era accesible a “los solicitantes” que cumplan las nuevas normas impuestas por el club blanco para ocupar este espacio. De esta manera, el Real Madrid recuperó el control absoluto de la grada en cuestión, estableciendo unas nuevas normas de funcionamiento con el fin de evitar los problemas detectados.