Pese a su error, el Madrid sólo gana con Iker: Champions y Copa el año de suplencia

Lisboa ya sabe de lo que es capaz Iker Casillas. El guardameta y capitán del Real Madrid fue el encargado de levantar al cielo portuguésla Décima o, lo que es lo mismo, su tercera Liga de Campeones como jugador madridista. El internacional español volvió a demostrar que está tocado por la varita de los más grandes, de esos jugadores que son capaces de cambiar el devenir de un partido y, una vez más, su equipo ganó un nuevo título con él sobre el terreno de juego, esta vez en el derbi europeo ante el Atlético de Madrid. Casillas volvió a demostrar su halo de grandeza: diez trofeos en trece finalesjugadas.

Y eso que el meta no comenzó nada bien. Corría el minuto 36 de partido cuando salía a la desesperada para hacerse con un balón que estaba lejos de su alcance. Iker se daba cuenta de su erráticaaccióny, en su intento por recular, no llegaba a salvar el gol de Godín, en un grave fallodel portero. El internacional era consciente de su mala decisión, que pudocostarle la Champions al Madrid. Así, en el minuto 93, cuando Sergio Ramos forzaba la prórroga con su gol de cabeza, Casillas se iba a besar al defensa, agradeciéndole que hubiera salvado el partido, que más tarde el Real Madrid se llevaría en el tiempo extra. De hecho, el portero se pasaría llorando desde el segundo gol de Balehasta el término del partido, en el que tuvo que mediar para evitar un enfrentamiento entre Varane y Simeone.

"Casillas será el portero de la Décima". Estas palabras fueron expresadas por Carlo Ancelotti a comienzos de la presente temporada, cuando el técnico italiano decidía que el orden establecido en la meta era dejar a Iker para la Copa del Rey y la Champions, mientras que Diego López sería el portero titular en la Liga. Pues bien, tras 22 partidos disputados y 10goles encajados, aquella frase del técnico italiano ya es una realidad. Casillas se ha convertido en una pieza fundamental para el título del conjunto blanco. De nuevo, el héroe madridista apareció para dar un nuevo éxito europeo para su equipo, pese a su grave error en el gol del Atlético de Madrid.

Y es que tal y como ocurriera en la Copa del Rey, la labor del meta ha sido básica. Si en aquel torneo llevaba al club blanco a sumar un nuevo título en sus vitrinas encajando un solo gol -el logrado por el azulgrana Marc Bartra en la final-, en la Champions volvió a hacer lo propio. Sus intervenciones han marcado el camino blanco -pese a que en la final de la Champions estuvo desafortunado-, entre las que cabe destacar una increíbe acción de reflejos ante Draxler en la ida frente al Schalke,dos buenas manos a Lewandowki en el partido de vuelta en Dortmund o una gran parada a Götze en la ida ante el Bayern en el Bernabéu. Casualidad o no, los dos títulos que ha ganado el Madrid esta temporada lo ha hecho con Casillas en la portería.

Y es que Iker está tocado por una varita.El metaes uno de esos jugadores que es preferible tener en tu equipo en una final. A lo largo de su carrera, ha disputado trece finalesen las que ha conseguido levantar diez títulos: cuenta en su haber con tres Ligas de Campeones, dos Copas del Rey, una Copa Intercontinental y una Supercopa de Europa con el Real Madrid, además de dos Eurocopas y un Mundial con la Selección. A sus 33 años, Iker sólo conoce tres fracasos en finales: una Intercontinental -Boca Juniors-, una Supercopa de Europa -Galatasaray- y una Copa Confederaciones -Brasil-.

En la historia reciente del Real Madrid, Casillas mucho tiene que ver en los éxitos de su equipo. Los últimos cinco títulos blancos -la Champions y la Copa de esta temporada, la Supercopa y la Liga de 2012 y la Copa de 2011- los ganó el conjunto blanco con su capitán en la portería, a pesar de la alternancia e incluso suplencia obligada a la que se ha visto relegado el internacional en los últimos tiempos. Casillas, que a principio de temporada era consciente de la obligación de ganarlo todo para poder jugar poco más de 20 partidos, ha conseguido su reto, cerrándolo con dos nuevos títulos que sumar a su palmarés.

Iker ha vuelto a demostrar su idilio con la Champions. Si en el año 2000 el Madrid lograba el título tras derrotar en una final ‘cómoda’ al Valencia (3-0), dos años después lo hacía de manera brillante: relegado a la suplencia, la inesperada lesión ante el Bayer Leverkusen de César Sánchez le hizo entrar al campo en el minuto 69. Tres históricas intervenciones del mostoleño daban al Madrid la ‘Novena’. Este sábado, de nuevo, volvió a ganar un título con el Real Madrid, a pesar de su mala sala en el tanto de Godín. Quién sabe si es el último que el capitán levanta con la camiseta blanca, esa a las que tantos éxitos ha dado con sus paradas.