Pini Zahavi, una "piraña codiciosa" que exige 15 millones de mordida por fichar a Alaba

Uli Hoeness, exdelantero del Bayern y presidente honorario del club de Baviera, no es precisamente el tipo más diplomático del mundo. De hecho, muchos le consideran un bocazas. Un bocazas que cuenta demasiadas cosas que no debería sobre las negociaciones cuando estas no transcurren como le interesan al Bayern. Y, en el caso de la renovación de David Abala, Hoeness alzó la voz el pasado mes de septiembre para atacar a Pini Zahavi, agente del jugador.

“Puedo entender que Salihamdizic entrase en pánico durante las negociaciones con Zahavi. David Alaba tiene como agente a una piraña codiciosa que quiere jugar una partida de póquer por Alaba. Y el Bayern evitará eso en cualquier caso", bramó Hoeness. Kicker reveló que Zahavi había exigido una ficha anual de 25 millones de euros brutos (13 netos) para Alaba durante cinco temporadas. Es decir, un desembolso de 125 millones durante el próximo lustro para el Bayern. Lo que convertía al defensa en el jugador mejor pagado del equipo, por delante de Robert Lewandowski, que cobra 10 millones netos anuales, el capitán Manuel Neuer o Thomas Müller. La oferta final del Bayern alcanzó los 8 millones netos, sueldo que Zahavi y Alaba desestimaron.

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Sin embargo, detrás de ese afilado "gierige Piranha", o piraña codiciosa, se escondía el enfado monumental de Hoeness al conocer la exigencia de Zahavi de cobrar una cantidad que rondaba los 15 millones de euros en concepto de intermediación por cerrar la renovación de su jugador. Comisión que el Bayern se negó a pagar desde el primer momento.

Esa mordida la tendrá que asumir cualquier club que quiera firmar al futbolista austriaco porque es condición 'sine qua non' para Zahavi. Lo cual dispara el coste de la operación a una cifra inasumible hoy en día para el Real Madrid o el Barcelona. Si Zahavi mantiene las exigencias de la negociación con el Bayern, cosa que podría rebajar por las ganas del jugador de venir a España, Alaba saldría más caro que Sergio Ramos. El camero, que actualmente percibe 10,8 millones netos anuales tras la reducción salarial de la plantilla, pretende renovar por dos temporadas manteniendo, al menos, lo que cobraba antes de la bajada, es decir, 12 millones netos anuales por cada una de las dos campañas. Alaba exigió al Bayern casi 13 netos al año por cinco temporadas, y a eso hay que sumar los 15 millones de la mordida de Zahavi.

Si el Madrid acepta las condiciones de Zahavi, Alaba saldrá más caro que Ramos

Florentino Pérez ya ha filtrado que el Real Madrid no está en disposición de asumir la renovación de Sergio Ramos con las exigencias del sevillano, así que la operación de David Alaba resulta aún más complicada de afrontar para las arcas blancas porque incluyen los 15 millones de Zahavi, comisión que penaliza notablemente la operación del austriaco. En Alemania se hablaba de un primer acercamiento del Real Madrid al jugador ofreciendo un salario que rondaba los 10 millones netos anuales, cifra por debajo de lo que el agente israelí pidió al Bayern. Alaba, de 28 años, firmaría un contrato de 11 millones netos anuales por cuatro temporadas.

Si finalmente hay acuerdo porque Florentino da a Alaba lo que niega a Ramos, el problema será asumir la mordida de la "piraña codiciosa" de Zahavi que Hoeness ya denunció en su día. En plena época de austeridad y con el fichaje de Kylian Mbappé en el horizonte, después de que el PSG le haya abierto la puerta, la secretaría técnica blanca diseña un plan de venta de jugadores para ingresar al menos 100 millones con los que afrontar el fichaje del delantero francés. Y, en ese escenario, los 15 millones de mordida, parecen un obstáculo difícilmente salvable para este Real Madrid que anda invirtiendo en la remodelación del Santiago Bernabéu.