El árbitro abandona el Athletic-Alavés por falta de deportividad

No hubo trofeo en el Euskal Herriko Kopa. En el minuto 89 del partido que enfrentaba al Athletic Club y al Alavés en Barakaldo (Vizcaya), el paraguayo Óscar Romero cometió una dura entrada sobre Enric Saborit. Se enzarzaron y se montó una tangana que Daniel Palencia Cabellero, árbitro de tercera división que dirigía el encuentro, no pudo sorportar tras un partido bronco. El jugador albiazul terminó expulsado y, sin más, el colegiado llamó a sus asistentes y se marchó del terreno de juego ante la perplejidad de los aficionados.

Desde los primeros compases del encuentro, el colegiado vasco lo tuvo complicado en un partido tenso y con continuas interrupciones. En la segunda mitad expulsó a Alexis Ruano despues de que se el defensa del Alavés se dirigiese a él para decirle algo o insultarle. Acto seguido, el jugador, antes de abandonar el campo, le tocó la cara del árbitro en claro signo de desprecio.

"Es una pena por parte de todos que acabase así el partido", declaró en rueda de prensa el Cuco Ziganda, entrenador del Athletic. "En la primera acción sí se podía haber ido, creo. Luego en la otra me ha parecido que todavía le duraba lo anterior. Ha estado demasiado afectado".

En lo deportivo, mejor impresión del Athletic, que sacó buenas sensaciones de cara al parido europeo del jueves ante el Panathinaikos en Atenas, ida de la ronda de 'playoff' de la Europa League, aunque tampoco hubo mucha diferencia. El Alavés, por su parte, mostró graves problemas defensivos que la pizarra de Zubeldia deberá analizar. Vesga y Aduriz anotaron para el Athletic e Ibai Gómez y Santos lo hicieron para el Alavés.

Ruano pide disculpas

Alexis Rueno pidió disculpas, un día después del partido, a través de su cuenta de Instagram. "Me arrepiento", dijo el jugador del alavés en un comentario que acompañaba una fotografía en la que aparecía entrenando con su equipo. "Nosotros al final tenemos que ser un ejemplo y en eso me comprometo en el futuro", sentenció.