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Florentino Pérez, en su laberinto: un mal ejemplo en la gestión de personas
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Florentino Pérez, en su laberinto: un mal ejemplo en la gestión de personas

Javier Mourelo, director de Recursos Humanos, socio del Real Madrid y directivo de la Asociación Valores del Madridismo, analiza la decisión del presidente del club blanco de destituir a Ancelotti

Foto: Florentino Pérez, presidente del Real Madrid (Efe)
Florentino Pérez, presidente del Real Madrid (Efe)

Es sabido que más del 60% de los trabajadores por cuenta ajena que decide cambiar de compañía lo hace para perder de vista a sus jefes. A gran distancia, los otros motivos sonel salario, la conciliación entre vida personal y profesional, el desarrollo profesional, etc...Comenzamos a trabajar en una organización y nos despedimos de sus jefes.

Este lunestuvimos la ocasión de ver a Florentino Pérezcompareciendo de nuevo fugazmente para despedir a su enésimo entrenador, el número nueve en sus doce años como presidente delReal Madrid, lo que le acerca un poco más a las marcas del fallecido Jesús Gil. A lo largo de este tiempo el carrusel de presentaciones vertiginosas e indemnizaciones por despidos improcedentes no se ha visto acompañado por los éxitos deportivos del que fue nombrado mejor club del siglo XX: tres Ligas en doce temporadas -siempre con el mayor presupuesto de la LFP- hablan por sí solas.

A falta de títulos, Florentino repite obsesivamente el mantra de que "la revista 'Forbes' nos considera el club más rico del mundo". Algo parecido sucedía en la época de los galácticos, cuando el soniquete consistía en haber logrado que Harvard incluyera el 'caso Real Madrid'entre los que componían los programas MBA de la prestigiosa escuela de negocios. Sin embargo, muchos de los errores de bulto que repite año tras año el presidente blanco podrían ser objeto del anticaso en gestión de personas.

1. Estrategia clara yreconocible a medio plazo

Manuel Pellegrini, aquel hombre educado al que gustaba el juego de toque fue relevado tras una temporada por José Mourinho, el ogro pendenciero y maleducado que juega a la contra y en función del rival. A continuación fue nombrado Ancelotti, el Del Bosque italiano amigo del laissez faire, laissez passer, que está a punto de ser sustituido por Benítez, un Mourinho autóctono con acento cañí y mucho por demostrar. ¿Alguna línea conductora?¿Algún camino reconocible o sólo el caos y el capricho? La respuesta presidencial a preguntas de los medios sobre el perfil del nuevo entrenador fue clarificadora: “eso ya la próxima semana”.

2. Credibilidad interna y externa

En marzo de 2015 Florentino, tan reticente a las conferencias de prensa, pasó públicamente al ataque descalificando al diario Marca por la información referida al cese cercano de Ancelotti. No era la primera vez: sucedió igual con Mourinho durante su último año como preparador del Madrid. La credibilidad perdida nunca vuelve. Never, never, never.

3. Comunicación interna

Antes de dar por terminada la rueda de prensa marca de la casa, el presidente reconoció que los jugadores aún no habían sido informados del despido de Ancelotti, su líder aceptado. De modo que Cristiano, Modric, Marcelo y todos los demás, que habían apoyado sin ambages el cumplimiento del contrato de Carletto, tuvieron que enterarse de la noticia por los medios o por Twitter. “Los empleados son el activo más importante de nuestra empresa”, solían decir los viejos discursos vacíos de muchos CEOs en la copa de Navidad, mientras miraban el reloj y el comité de empresa comenzaba a patalear.

4. Trabajo en equipo

Nada tan empalagoso como las imágenes postjornada electoral en que los dirigentes de los partidos políticos se agolpan en el estrado sonrientes para asegurar que, también ellos, han ganado. Pero, de ahí a lasdecisiones presidencialistas unilateraleshay un trecho. Aló, presidente, hay que empoderar (sic) más a los directivos y mandos intermedios, porque, ¿alguien puede decir el nombre de más de tres directivos del actual Real Madrid?

5. Formación y promoción interna vstalonario

En tiempos de métricas exhaustivas, evaluaciones del desempeño y del cumplimiento obsesivo de objetivos, ¿realiza el club algún estudio del ROI en el caso de los fichajes multimillonarios? Sería oportunista hablar ahora del coste y del retorno de grandes jugadores como GarethBale o James Rodríguez, pero no lo es tanto recordar a Morata o a otros talentos desaprovechados en casa. No parece tan difícil pensar un poco más a largo plazo y mostrar un poco más de paciencia.

Doce años con Florentino se han hecho, sin duda, molto longo.

Es sabido que más del 60% de los trabajadores por cuenta ajena que decide cambiar de compañía lo hace para perder de vista a sus jefes. A gran distancia, los otros motivos sonel salario, la conciliación entre vida personal y profesional, el desarrollo profesional, etc...Comenzamos a trabajar en una organización y nos despedimos de sus jefes.

Florentino Pérez
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