El Real Madrid necesitaría dos estadios para homenajear a Raúl

Con Bale o sin él, la afición del Real Madrid cuenta los días para ver en directo el nuevo proyecto que está preparando Florentino Pérez. El conjunto blanco levantará el telón el día 18 de agosto en el Santiago Bernabéu a las nueve de la noche cuando se enfrente al Betis con caras nuevas como Isco, Carvajal e Illarramendi. Aunque el inicio de la Liga está marcado en el calendario de los seguidores madridistas, la fecha que más esperan es la del Trofeo Santiago Bernabéu: el 22 de agosto Raúl volverá a la que fue su casa durante 16 temporadas para volver a vestir de blanco ya que disputará una parte con el Al Sadd y otra con el Real Madrid igual que hizo en el homenaje que le rindió el Schalke. La expectación es tal que las entradas están a punto de agotarse y las colas se suceden en las taquillas del feudo madridista.

Hace tres años que Raúl puso punto final a su etapa en el Real Madrid. El delantero cambiaba España por Alemania, dejaba de vestir de blanco para hacerlo con el azul del Schalke. Su despedida se organizó sobre la marcha y sólo 2.000 aficionados pudieron despedirse del que había sido su capitán. La falta de un adiós a la altura de la figura de Raúl ha sido algo que el Santiago Bernabéu siempre ha demandado pero el jugador prefería no recibir homenajes mientras estuviese en activo. La temporada pasada se movieron los hilos para que fuese el Schalke el invitado a disputar el Trofeo Bernabéu pero el sorteo de la Europa League lo impidió.

Un año después del primer intento, Raúl podrá recibir el cariño de una afición que no le olvida. El Al Sadd será el equipo que se enfrente al Real Madrid el próximo 22 de agosto y el ambiente promete ser espectacular. Las entradas para el público general (van de los 15 a los 65 euros) se pusieron a la venta este lunes y durante la primeros jornada el acceso al sistema de venta fue complicado y, en algunos casos, imposible. Los aficionados también se han acercado a las taquillas del Santiago Bernabéu donde las colas que se han formado han sido la imagen de estos días. Algunos de los seguidores madridistas aseguran que la cita “se queda corta” para homenajear a Raúl y es que el ritmo de ventas apunta al lleno: en la tarde del martes quedaban 398 entradas por vender y 8 localidades VIP.