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La fiebre por la Roja vuelve en Brasil
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A DIFERENCIA DE EEUU, EN EL PAÍS LATINOAMERICANO LA SELECCIÓN ESPAÑOLA ES PROTAGONISTA

La fiebre por la Roja vuelve en Brasil

Tras pasar casi desapercibida en su periplo estadounidense, la selección española vuelve a su hábitat natural de flashes, miles de aficionados reclamando su atención y copando

Foto: La fiebre por la Roja vuelve en Brasil
La fiebre por la Roja vuelve en Brasil

Tras pasar casi desapercibida en su periplo estadounidense, la selección española vuelve a su hábitat natural de flashes, miles de aficionados reclamando su atención y copando la actualidad de todos los medios de comunicación locales. La 'futbolera' Brasil sí se ha hecho eco de la llegada de la campeona del mundo, y de qué manera. A su llegada al hotel, muchos aficionados aguardaban a los futbolistas de Vicente del Bosque, solicitando una firma o una foto. Algo similar sucedió con los numerosos medios informativos que se agolpaban en el lugar de estancia de la Selección en Recife con la intención de captar imágenes y/o declaraciones de los protagonistas. Eso sí, su gozo, en un pozo. Las adversas condiciones meteorológicas (diluviaba en la localidad brasileña) provocaron que los internacionales españoles no se detuvieran ante nadie. Algunos saludos en la lejanía a periodistas y aficionados, y poco más.

La gran potencia económica mundial no es muy propensa a esto que ellos llaman 'soccer' y nosotros fútbol. Por eso, los campeones de Europa y del mundo vivieron una estancia muy relajada. Tan sólo la colonia hispana y los pocos estadounidenses seguidores de nuestro deporte rey reclamaron su atención. Por primera vez se sintieron secundarios en una sociedad donde el fútbol, pero americano, el beisbol, el hockey y el baloncesto son la gran atracción. Incluso los propios internacionales lo pudieron comprobar, acudiendo al primer partido de las Finales de la NBA entre Miami Heat y San Antonio Spurs.

Los medios apenas prestaron atención al paso de la selección española por el imperio 'yanqui'. Breves menciones que pasaron totalmente desapercibidas en televisiones, radios, periódicos y páginas web. A eso hay que añadir que los estadios, fundamentalmente el de Miami, no se aproximaron ni por asomo al lleno para ver al que la gran mayoría considera el mejor equipo de la historia de este deporte.

Pero eso sólo ha sido un impás. Vuelven a territorio futbolero, y Brasil nada tendrá que ver con el periplo USA. La prueba más evidente, además de lo mencionado de aficionados y periodistas en el hotel, ha sido el tratamiento que los periódicos ya han dado al combinado de Vicente del Bosque. Así, el Diario de Pernambuco titulaba '¡Me pellizque! Aquí están los campeones del mundo', y el Jornal do Comercio encabezada su información con un contundente 'La Furia ha llegado'. Otros grandes medios brasileños, casos de O Globo o el Jornal do Brasil, dedicaban un gran espacio de su información para el combinado nacional, dejando bien a las claras que aquí sí la selección española es capital.

A dos días para que comience la Copa Confederaciones, la anfitriona Brasil y España son los centros de atención de la torcida. Todos sueñan con una final entre ambas selecciones, siempre con el permiso de Italia y Uruguay, las otras dos grandes selecciones del torneo. Los brasileños, por el hecho de ser anfitriones, y los españoles, por haber ganado todo en los últimos cuatro años, son los que cuentan con la vitola de favoritos y sobre ellos recae toda la presión de medios y aficionados. Para el combinado de Del Bosque, se acabo la 'paz'.

Tras pasar casi desapercibida en su periplo estadounidense, la selección española vuelve a su hábitat natural de flashes, miles de aficionados reclamando su atención y copando la actualidad de todos los medios de comunicación locales. La 'futbolera' Brasil sí se ha hecho eco de la llegada de la campeona del mundo, y de qué manera. A su llegada al hotel, muchos aficionados aguardaban a los futbolistas de Vicente del Bosque, solicitando una firma o una foto. Algo similar sucedió con los numerosos medios informativos que se agolpaban en el lugar de estancia de la Selección en Recife con la intención de captar imágenes y/o declaraciones de los protagonistas. Eso sí, su gozo, en un pozo. Las adversas condiciones meteorológicas (diluviaba en la localidad brasileña) provocaron que los internacionales españoles no se detuvieran ante nadie. Algunos saludos en la lejanía a periodistas y aficionados, y poco más.