Messi queda retratado al insultar a Karanka en el vestuario y a Arbeloa en el parking del Bernabéu

Piqué y Cristiano Ronaldo terminaron el 'Clásico' abrazados, hablando de su pasado en Manchester y de su presente como rivales. El gesto marcó un Real Madrid-Barcelona que pareció desarrollarse con tranquilidad y pleno de deportividad pero la realidad dice que no fue así o, al menos, la felicidad no fue plena. Media hora después de terminar el partido, algunos jugadores de ambos equipos se cruzaron en la zona del parking. Los madridistas iban acompañados de sus familias y se dirigían a recoger el coche, mientras que los azulgrana se encaminaban hacia el autobús. Frialdad, distancia y cierta indiferencia hasta que Messi se cruzó con Arbeloa. Tal y como informó Puntopelota, el argentino se dirigió al español a gritos de "bobo, bobo" en respuesta a lo sucedido en el terreno de juego.

El Balón de Oro explotó y perdió las formas ante Arbeloa, como antes había hecho con Karanka en el túnel de vestuarios. Messi no se sintió cómodo durante todo el partido. No jugó bien y sus apariciones fueron escasas, aunque tuvo tiempo de asistir a Cesc para que inaugurara el marcador. El argentino señala al defensa y a Xabi Alonso como los instigadores de la táctica de no dejarle jugar, de intentar desesperarle con todo tipo de provocaciones sobre el césped. Al donostiarra se lo dijo sobre el césped, en el camino al vestuario se lo recordó al segundo entrenador blanco y en el parking, emulando a Mourinho hace un año, a Arbeloa. El Barcelona niega estos incidentes que, según diferentes empleados del Real Madrid consultados por El Confidencial, relatan lo sucedido y el nerviosismo de Messi.

La plantilla del Barcelona se marchó indignada. No esperaban el empate final. Les sorprendió el acierto de Varane y pasaron a buscar culpables a ese empate, señalando al árbitro por la permisividad que tuvo y a los dos madridistas anteriormente citados por su juego duro y mal intencionado. "El arbitraje fue sorprendente", comentó ayer Jordi Alba en un acto de Adidas. Lo cierto es que el campeón de Europa fue comedido porque en el Bernabéu, recién duchados, hablaban de robo. Moderaron su mensaje en la zona mixta pero seguían con la indignación. "Tengo un recuerdo de Essien", comentó respecto a una jugada que terminó en un pisotón del madridista. 

Alves en el punto de mira madridista

Arbeloa y Xabi Alonso son dos de los jugadores más próximos a Mourinho de la plantilla blanca y los más distanciados de los hombres de Vilanova y Roura. Son fieles a las ideas del portugués y en los últimos incidentes mantenidos por el técnico con Casillas y Ronaldo se han mantenido al margen. No se han mojado por sus compañeros. 

En el Real Madrid reconocen que la intensidad de estos partidos ha bajado, la rivalidad no va más allá de lo que sucede en el terreno de juego, de ahí que sorprendiera la reacción del argentino. Ya no existe la orden de cargar de tensión los partidos. Mourinho pide que jueguen al límite, órdenes que cada cual las interpreta como crea conveniente y las lleva a la práctica según su personalidad. La plantilla blanca también tienen a su jugador favorito a la hora de buscar el origen de algunas de las disputas que suceden en este tipo de partidos. Apuntan a Alves y a su excesiva actuación desde el primer minuto como inició de algunos de los encontronazos que se producen en cada enfrentamiento entre los dos equipos.