Abramovich sigue empeñado en interrumpir el año sabático de Guardiola en Nueva York

Pep Guardiola ha sido siempre el anhelo del ambicioso Abramovich. El magnate ruso suspira por el técnico azulgrana (hasta el 30 de junio no expira su contrato con el Barcelona) desde hace muchos años pero en el momento en el que el de Sampedor anunció que dejaba libre el timón del conjunto culé, Abramovich ha cambiado su estrategia. De cortejar a Pep ha pasado a técnicas de acoso y derribo para lograr que Guardiola escuche sus ofertas y lograr que alguna de éstas le seduzca. Por eso, no extraña que el hermano del entrenador catalán, Pere, se haya reunido con representantes del Chelsea tal y como afirma People. Para desgracia del ruso, las intenciones del técnico pasan por tomarse un año sabático alejado de los terrenos de juego. La presión, la exigencia y el alto nivel que ha mantenido en los últimos años le han llevado a querer alejarse del balón. Aunque no por mucho tiempo. Guardiola está hecho de y para el fútbol así que su regreso no tardará en producirse. Y esta es la principal baza de Abramovich.

El magnate del petróleo llegó a Londres en 2003 y compró el Chelsea. De esta forma desaparecía la deuda del club inglés que empezó a ganar enteros gracias a la fuerte inversión que Abramovich hizo: nada más y nada menos que 900 millones. Poco le importaba al ruso poner un millón detrás de otro para hacerse con los mejores jugadores del mundo, su objetivo era ganar títulos, hacer del Chelsea un equipo temido en Inglaterra y Europa. Hace algo más de una semana conquistó el único título que le faltaba, y el que más deseaba, la Champions. El trofeo supone la guinda a una temporada en la que el Chelsea también conquistó la FA Cup a pesar de la inestabilidad reinante en el banquillo. Villas Boas fue cesado y aunque Di Matteo fue el encargado de recoger el testigo, Abramovich desea que sea otro el dueño del banquillo de Stamford Bridge.

En los últimos años, Guardiola se ha cansado de rechazar las propuestas que llegaban desde el Chelsea. En su cabeza sólo había sitio para el Barcelona pero tras cuatro años al frente del equipo en los que ha ganado todo, Pep se va. Necesita un cambio en su vida y éste pasa por alejarse del fútbol para ‘desintoxicarse’ y, tras un año de descanso, poder volver a pensar y a vivir de su pasión. Abramovich conoce la intención de Guardiola de irse a vivir a Nueva York y por eso se ha puesto en contacto con él para ofrecerle un proyecto de futuro que comenzaría en la temporada 2013/2014 coincidiendo con el final del contrato de Di Matteo al que sólo le han puesto sobre la mesa un año más. La Premier League es del gusto del catalán y el objetivo del ruso es que Guardiola se incorpore a la disciplina inglesa dentro de un año. Para ello no ha reparado en anzuelos: desde Beguiristain, director técnico en los primeros años de Pep en el Barcelona, hasta Messi. El dueño del Chelsea no tendría problema en pagar los 250 millones de la cláusula del argentino aprovechando que su máximo valedor desaparece del Barcelona.

El entrenador mejor pagado: 15 millones por temporada

Estos no son los únicos dulces que el Chelsea ofrece a Guardiola. Messi podría llegar acompañado de otros jugadores y el sueldo del entrenador llegaría a los 15 millones de euros por temporada. Según People, en la reunión mantenida entre el hermano de Pep y el club inglés, los representantes del Chelsea habrían hablado de una oferta de 10 millones de libras al año, autoridad para hacer las reformas y los cambios que él considere necesarios y la ausencia de presión en los dos primeros años. Es decir, Guardiola no estaría obligado a traer títulos al equipo en sus primeras temporadas al frente del Chelsea. Además, Abramovich apostaría fuerte por la cantera, uno de los valores más tenidos en cuenta por el de Sampedor y también su fuente de talento. El proyecto es atrayente, sólo falta saber cuánto tiempo podrá resistir Pep su desconexión del mundo del fútbol.