El Liverpool no jugará en el vigésimo aniversario de la tragedia de Hillsborough

El Liverpool no tendrá que jugar el próximo 15 de abril su encuentro correspondiente a la vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Chelsea, misma fecha de la conmemoración del vigésimo aniversario de la tragedia de Hillsborough, en la que fallecieron 96 hinchas del conjunto de Anfield. El sorteo fue caprichoso y evitó que ambas fechas coincidieran.

 

El conjunto entrenado por Rafa Benítez, tras eliminar al Real Madrid en los octavos de final de la competición, solicitó a la UEFA que, en caso de que coincidieran ambos eventos, pudieran adelantar la fecha de su partido, para poder llevar a cabo una serie de actos en conmemoración de aquellos que perdieron su vida en el estadio de Hillsborough mientras apoyaban a su equipo. Finalmente, no hizo falta, ya que el sorteo decidió que se jugase un día antes.

Todo sucedió el 15 de abril de 1989, cuando se disputaban las semifinales de la Copa Inglesa entre el Liverpool y el Nottingham Forest. El partido había comenzado, y la zona en la que se agolpaban los hinchas del Liverpool estaba ocupada por más gente de la que su capacidad permitía. A pesar de ello, los aficionados seguían entrando en esa grada, creando una verdadera marea humana.

Tanto fue así que incluso algunos aficionados saltaron al estadio para pedir a los jugadores que se parase el encuentro: “Ahí dentro está muriendo nuestra gente”, escuchó Alan Hansen, capitán de los red de boca de un aficionado. A pesar de todo, el partido siguió, hasta que en el minuto siete se consumó la tragedia. Los hinchas derribaron una de las puertas de la grada para poder abandonarlas, y el miedo se apoderó del estadio.

El fútbol cambió a partir de ese día

Gente desesperada por huir, por tratar de salvar sus vidas de entre la multitud, en uno de los días más negros de la historia del fútbol, que finalizó con 96 víctimas mortales y más de 170 heridos. A partir de ese momento, se endurecieron enormemente las medidas contra los hooligans, de mano del gobierno de Margaret Thatcher, dictando la ‘Footbal Spectators Act’ y el ‘Informe Taylor’.

El primero de ellos propone dos medidas centrales para el control de los hooligans: elaboración de cédulas de identificación para hinchas y medidas para que estos den cuenta de sus ubicaciones a la hora de asistir a partidos de su ciudad de origen y a nivel internacional; mientras que el segundo, propone hasta 76 recomendaciones para elevar los niveles de seguridad en los estadios de fútbol.

Desde aquel momento, el fútbol nunca volvió a ser el mismo. Ahora, el Liverpool podrá honrar a los aficionados que fallecieron en el estado de Hillsborough, en Sheffield, para que nunca más vuelva a suceder nada parecido en un estadio de fútbol. Por suerte, el Liverpool no tendrá que jugar el día 15 y podrá honrar, como merecen, a las víctimas de aquel funesto día para el deporte rey.