Los 24 pinchazos de Fernando Alonso y la (dudosa) crítica por elegir a Marc Coma

“Que tenga velocidad está fuera de discusión, pero necesitará tiempo para aprender. En Marruecos sufrió mucho, también porque creo que cometió el error de correr con Marc Coma a su lado. Marc fue un gran piloto, pero no es un navegador puro, que es lo que [Fernando] Alonso necesitaría aprender… Sólo hace falta ver que en todo el rally han sufrido 24 pinchazos y yo, por realizar una comparación, no pinché ni una vez. Esto pasa porque todavía no ha entendido con qué velocidad debe afrontar las zonas de piedras”. Stephane Peterhansel ha ganado 13 veces el Dakar y ha mostrado su opinión sobre la que puede ser la figura más mediática de la próxima edición de esta prueba.

Más allá de que tenga razón o no, el curtido en mil batallas Nacho Salvador, destacó en El Confidencial otro punto de vista interesante sobre esa elección de Marc Coma como compañero de fatigas: “Para mí, la elección de Marc Coma es genial. Ha elegido a alguien que ha ganado el Dakar cinco veces, pero si hubiera cogido al mejor copiloto del Dakar, si él lo hace mal, se le señala a él. Ahora está montando con alguien que tiene la mayor de las experiencias porque ha navegado solo un montón de años, pero también es un poco novato, con lo cual se camuflaría un poco el no ganar directamente”.

Peterhansel habla a la 'Gazzetta dello Sport' desde el punto de vista del aprendizaje sin más. Sin incluir esas variables como son la opinión o la presión que pudiera tener el asturiano si tuviera a un número uno contrastado al lado. Salvador lo hacía desde el ángulo beneficioso que tiene crecer con un número uno en potencia. Al igual que Peterhansel no pone en duda que Alonso tenga velocidad, Salvador también deja caer que el aprendizaje que tendrá Coma será prometedor de cara al futuro.

Correr de incógnito...

Quizás, la solución utópica hubiera sido que Alonso corriera en Marruecos con un nombre falso (el hijo de Michael Schumacher adoptó esta solución al principio de su carrera deportiva) y una careta dirigido por un copiloto de infinita experiencia, y que Coma hubiera hecho lo propio pero dando órdenes a un piloto veterano y ganador. De ese modo, ambos llegarían al Dakar con más experiencia y una curva de aprendizaje más elevada que haciendo el camino juntos (aunque la sintonía entre ambos en situaciones límites se descubriría sobre la marcha...). Y ya en el Dakar, la presión para los dos sería similar puesto que seguirían siendo considerados novatos.

Como esta circunstancia era imposible que se diera, la opción elegida parece la más adecuada si el objetivo de ambos no es a corto plazo. Esto es, hasta que ambos amplíen a su propio límite sus cualidades para pilotar y para dirigir, respectivamente. Con su potencial, la pareja española está llamada a ser aspirante a un raid cuando estén curtidos y, como apunta Peterhansel, no pinchen “24 veces” donde el propio 'Monsieur Dakar' (quien, por cierto, tiene de copiloto a su experimentada mujer, Andrea Mayer) no lo hace, o no se topen en un socavón que Carlos Sainz 'olió' y esquivó por un lado… Hacer sombra a 'monstruos' como estos dos conquistadores del Dakar no es sencillo.

Sabiendo que la mejor cualidad de Alonso es la adaptación rápida a cualquier vehículo y superficie, en este caso es necesaria una dosis extra de paciencia y tiempo para, primero, ser competitivo en un raid, y segundo, llegar a ganar un Dakar y reinventar aquello de la Triple Corona a Cuádruple Corona. Tan fascinante, complejo e insólito este logro que está llamado a tomárselo prácticamente como un proyecto vital, a largo (y calmado) plazo.

Como los más zorros del Dakar dicen -incluyendo el propio Peterhansel-: “Hay que saber ir lo suficientemente despacio para poder ir deprisa”. En este aprendizaje, Fernando Alonso y Marc Coma tampoco tienen por qué ir deprisa para llegar más lejos.