Para hacérselo mirar: el motivo de Porsche para dar la patada definitiva a la Fórmula 1

Sus técnicos recibieron una “orden concreta” de la cúpula para desarrollar y construir un motor V6 con la Fórmula 1 en mente. Parte del equipo del Mundial de Resistencia fue destinado a este proyecto. La marca estuvo presente en la Comisión de Fabricantes de la FIA desde 2017 e involucrada en las conversaciones sobre la estrategia futura de la Fórmula 1 a partir de 2021. Se llevaron a cabo estudios económicos. Un fabricante con el prestigio de Porsche estudiaba seriamente su participación en el Campeonato del Mundo. Sin embargo…

¿Por qué la Fórmula 1 no fue capaz de atraer a Porsche? ¿Por qué se echó finalmente atrás su cúpula directiva en la única marca del Grupo Volkswagen con opciones para entrar en ella? Aunque factores de diferente naturaleza jugaron finalmente en contra, tanto la Fórmula 1 como Liberty y la FIA deberían estar tomando buena nota del rechazo del fabricante alemán.

Orden de constuir el motor

La publicación británica Autosport ha entrevistado a Frizt Enzinger, vicepresidente de Porsche Motorsport, quien ha ampliado detalles del alcance e intenciones de la potencial entrada en la Fórmula 1. La llegada de Liberty y la reestructuración prevista animaron a valorar seriamente el proyecto. Así, Lutz Mechske, uno de los miembros de su consejo, se reunió en el Gran Premio de Italia de 2017 con Ross Brown, mientras sus delegados participaban en el seno de la FIA en la configuración del nuevo rumbo reglamentario previsto para 2021. En aquellos momentos sus ingenieros ya proyectaban el desarrollo de un seis cilindros con potencial para ser usado en la Fórmula 1. A finales de aquel año recibieron luz verde para fabricar físicamente el motor.

Pero ese propulsor necesitaba un esquema claro. Dentro de la filosofía de simplificación técnica, los fabricantes valoraban la eliminación del sistema híbrido de recuperación de gases utilizados hasta el momento en la Fórmula 1. Porsche se había retirado del WEC, y la presencia en la Fórmula E supone un presupuesto reducido en comparación al WEC. Quedaba margen para afrontar un proyecto más ambicioso con las premisas técnicas adecuadas. Y por aquí empezó a encallar la travesía de Porsche hacia la Fórmula 1.

Sí, pero al final, no

Porque los fabricantes no estaban tanto como aparentaban por la labor de simplificar el esquema técnico de la Fórmula 1. “Los cuatro que están presentes no están interesados en cambiar la reglamentación de ninguna manera”, explica Enzinger, rechazo que poco a poco empezó a manifestarse públicamente en estos dos últimos años. “Los cambios les hubieran producido incrementos adicionales de costos. Así que entiendo que quieran seguir con el mismo reglamento mientras no haya otro fabricante a la vista, o solo querrían cambiar algunos detalles".

La pregunta se plantea sola. ¿Los fabricantes no fueron más allá en las reformas alegando la falta de interés de otros candidatos? ¿O no había candidatos antes las dificultades levantadas al cambio? Porque otros posibles candidatos como Cosworth o Aston Martin ya habían perdido todo el interés inicial mostrado tan pronto comprendieron que las unidades de potencia híbridas no iban a alterarse. Como realmente ha sucedido.

Pero no se trataba ya solo de los motores. La falta de concreción de la Fórmula 1 en la reducción de costes -demoradas ahora hasta después de verano- impedía cualquier concreción de un programa financiero concreto. Porsche quería un peso específico superior al de un mero fabricante de motores. Pero los costos del presente tampoco ayudaban a tomar la decisión. “Por supuesto, hubiéramos tenido que incremental mucho el personal”, expliz Enzinger a la publicación británica. Si el consejo hubiera dicho que teníamos que ir hacia la Fórmula 1, hubiera sido posible en cualquier momento. Y además de el mero desarrollo del motor, también recibimos la orden de preparar un estudio de viabilidad para entrar en la Fórmula 1”.

"La F1 ya no tiene lugar"

Como grupo, Volkswagen ya había estudiado en 2015 que alguna de sus marcas entrara en la Fórmula 1. Pero el famoso “Dieselgate” se cruzó en el camino e impactó brutalmente en algunos de sus programas deportivos. Sin embargo, la utilización de una tecnología híbrida ya existente en Porsche jugaba a favor de la Fórmula 1. Pero , los presupuestos de participación se disparaban. “La Fórmula 1 es costosísima. Mercedes, por ejemplo, construye el motor con 500 personas. Nosotros construíamos el nuestro del WEC con cuarenta personas. Hasta hoy, no hay todavía límite presupuestario en Fórmula 1. Sabemos lo que cuesta una carrera de Fórmula 1, y cuánto cuesta poner en pie un equipo completo. Mercedes tiene 1.200 empleados entre Brackley y Brixworth. Los costes son enormes”. Y como reconoce Enzinger, el Dieselgate "ha costado una inmensa cantidad de dinero".

El Grupo Volkswagen afrontaban sus propios factores condicionantes interno. A pesar de ello, Porsche era la marca ideal para el desembarco. Enzinger reconoce que la llegada de Liberty Media y la revisión del esquema financiero y tecnológico de la Fórmula 1 jugó un papel crucial para su valoración de la Fórmula 1 como marca. Sin embargo, sus responsables se encontraron con ese muro técnico y económico que aún no ha sido derribado. “Técnicamente es posible”, explica Enzinger sobre una posible reactivación del proyecto, “pero no en la práctica. Porque hoy tenemos una situación completamente diferente en el Grupo, orientado claramente hacia la movilidad eléctrica. Incluso competimos con dos marcas en la Fórmula E (Audi y Porsche). La Fórmula 1 no tiene lugar actualmente en esta filosofía. El hecho de que la cúpula siga todos los campeonatos y su desarrollo es uno de las obligaciones de los responsables deportivos. Pero una posible implicación se ha acabado”. Algo tendrá que hacerse mirar la Fórmula 1…