El Real Madrid aún tiene trabajo por delante para volver a ser el de la temporada pasada

El Real Madrid acabó su partido en Estambul con un 6/28 en triples (21%), un 12/19 en tiros libres (63%) y 18 pérdidas, y aun así tuvo varias oportunidades para luchar por la victoria. El Fenerbahçe, que acabó llevándose la victoria, tampoco está para tirar cohetes, y le dio varias oportunidades a su rival durante todo el partido. Sin embargo, el Madrid no las supo (o no pudo) aprovechar y sumó su segunda derrota en la Euroliga (77-66), tras la de la primera jornada contra el Khimki.

Tras tres victorias seguidas, las tres muy claras, contra el Gipuzkoa Basket, el Estrella Roja y el Iberostar sirvieron para que el Madrid recuperara sensaciones, descansara durante diez sin viajes y recuperara lesionados, pero ninguno de esos tres equipos es el Fenerbahçe de Zeljko Obradovic, que fue mejor que un Real Madrid incapaz de imponer su ritmo y mandar en el partido salvo en períodos aislados. Pese a eso, nunca le perdió la cara al partido por dos razones: porque el Fenerbahçe tampoco ha alcanzado aún su velocidad de crucero y porque dominó el rebote ofensivo.

El rebote ofensivo mantiene vivo al Madrid

El Madrid acabó el partido con 20 rebotes ofensivos, casi los mismos que el Fenerbahçe cogió en defensa (24). Eso le permitió no descolgarse a pesar de su horrible procenttaje de tres: al final del primer cuarto sólo había metido 2/12, pero los rechazos en la canasta rival le permitían tener segundas (y terceras oportunidades) y mantenerse cerca en el marcador: 20-18.

Ekpe Udoh estaba haciendo mucho daño por dentro (9 puntos en los primeros 10 minutos), pero fue Bobby Dixon el que abrió una brecha peligrosa (29-20) que la defensa de Carroll sobre el pequeño base y los rebotes de Felipe Reyes recortaron. Laso dio minutos a Taylor, que en su segundo partido estuvo mucho peor que en el primero: precipitado y sin acierto. Reyes encontró ayuda Gustavo Ayón, que redujo la diferencia a cinco puntos (37-32) antes de que Luigi Datome cerrara la prmiera parte (39-32).

La diferencia aumentó hasta los 13 puntos mediado el tercer cuarto, en el que el Madrid entró en bonus a los dos minutos y Bogdan Bogdanovic aprovechó su velocidad ante Maciulis, incapaz de pararlo. Fueron los minutos más feos, con muchas faltas y los dos equipos incapaces de imponerse. Eso acabó perjudicando al Fenerbahçe, que fue incapaz de dormir el partido y asegurarse la victoria. El Madrid llegó a colocarse a seis puntos tras una canasta de Rudy Fernández (60-54), la menor diferencia que tuvo de ahí hasta el final.

En el último cuarto, el Fenerbahçe realizó una defensa excelente, provocando que cada tiro madridista fuera forzado. A pesar de eso, el Madrid estuvo a 7 y con posesión, pero Thompkins perdió el balón y Sloukas anotó al contragolpe. Ahí murió el partido, pues los blancos sólo anotaron cuatro puntos más en los cuatro minutos que quedaban. Ese fue todo el bagaje ofensivo del Madrid en los últimos 4:56 minutos. Y así es casi imposible ganar fuera de casa en la Euroliga.

Ficha técnica:

77 - Fenerbahce (20+19+24+14): Sloukas (6), Bogdanovic (12), Kalinic (4), Udoh (15) y Vesely (8) -quinteto inicial-, Dixon (6), Datome (15), Antic (4) y Hersek (7).

66 - Real Madrid (18+14+24+10): Llull (5), Rudy Fernández (9), Maciulis (5), Nocioni (5) y Ayón (8) -cinco titular-, Rodríguez (8), Reyes (15), Thompkins (4), Carroll (5), Taylor (-) y Hérnangomez (2).

Árbitros: Lamonica (ITA), Jovcic (SER) y Herceg (CRO). Sin eliminados

Incidencias: partido de la tercera jornada del Grupo A de la Euroliga disputado en el Ulker Sports Arena de Estambul ante 12.886 espectadores.