Hasta aquí hemos llegado, Pablo: el Madrid pagó la novatada en Moscú

Algún día tenía que llegar: perdió el Madrid, noticia. El Real Madrid ‘ganalotodo’ de Pablo Laso frenó su racha en 31 triunfos seguidos. El CSKA, su mayor verdugo en la historia de Europa –ahora con 23 victorias sobre los blancos-, ganó ante un equipo que sólo demostró ser ‘imbatible’ durante poco más de 10 minutos. El resto del encuentro fue sólo una sombra de lo que acostumbra a ser, sobre todo al final, donde las prisas provocaron imprecisiones. Novatos en esta situación de jugar tan abajo en el marcador en los minutos finales. Pocas cosas funcionaron en este resbalón que les dejó a tres partidos del récord total que sigue ostentando el Joventut (34 victorias consecutivas) y a cuatro del que tiene el CSKA en Euroliga (17).

“Le hacía falta una derrota para crecer como equipo”. Amaya Valdemoro, comentarista del encuentro en Canal+, vio el lado positivo de una derrota que no le afecta demasiado en su andadura por la Euroliga (sigue líder de grupo con tres victorias y una derrota, igual que el CSKA). La exjugadora es de la opinión que todo equipo debe aprender de una caída para llegar con la lección sabida hacia el final de temporada, cuando los títulos están en juego.

El Madrid, novato en esto de anotar menos que el rival, abandonó la pista con la imagen de impotencia de un Bourousis siendo retirado por Laso mientras discutía y se encaraba con algún jugador del CSKA. Esta situación es nueva para los merengues y no todos la encajan de la misma manera.

El lastre lo llevó desde el primer minuto

El comienzo del partido supuso un lastre para el Madrid del que ya sería incapaz de desprenderse. Un punto por minuto. Esa es la media que los blancos realizaron en la toma de contacto del choque. Porcentajes pírricos como 1 de 6 en triples o 3 de 10 en tiros de dos tuvieron la culpa de que el CSKA, sin hacer un esfuerzo extraordinario, finalizase el primer cuarto con trece puntos a favor, 23-10, llegando a tener quince puntos de ventaja. La intensidad que estaban poniendo los de Messina –reflejado en un 13 a 6 en rebotes- fue suficiente para obtener este importante colchón de puntos sobre los blancos. Nada de lo que hacen habitualmente parecía funcionar.

En el segundo cuarto, con el Chacho en pista, la cosa no iba pa’ lante. La defensa continuaba haciendo aguas y pese a dos canastas iniciales visitantes, los locales recuperaron de nuevo el control del balón para marcharse en el marcador. De repente, dos anotaciones seguidas de Rudy… espejismo. Krstik y Vorontsevich empujaron a los suyos para poner una diferencia de 19 puntos favorable al CSKA. Y sólo quedaban tres minutos para el descanso.

En este momento, el Chacho se arremangó: dos triples, un par de asistencias, otros tantos tiros libres y el Madrid se marchó con vida al vestuario. Diez abajo y con los pupilos de Laso reclamando una falta bajo el aro que podía haber supuesto un -8 que hubiera sabido a gloria (más todavía). En 3 minutos se arregló un descalabro de los 17 anteriores, algo que hablaba mucho de lo que es capaz el equipo más en forma de toda Europa.

Un apabullante parcial de 24 a 6 en menos de 10 minutos

Con un parcial de 24-6 (contando los últimos minutos del segundo cuarto), el Real Madrid logró ponerse a tiro del CSKA. Sergio Rodríguez, Mirotic, Sergio Llull y, sobre todo, una excelente defensa, posibilitaron que llegaran a ponerse a 3 puntos. Enseñó músculo. Los 16-6 en rebotes que había favorables al equipo moscovita en la primera mitad, se igualó en unos minutos en el tercer periodo a 24-20. Nuevamente, los rebotes dan una idea de la fortaleza de cada conjunto en un determinado momento. Al final de este cuarto, 4 abajo el Madrid y todo por decidir en los últimos 10 minutos. Definitivamente se había arreglado el despropósito inicial.

Pero, cuando mejor tenía el panorama, la peor cara del Real Madrid regresó. Volvieron a llegar las imprecisiones -con dobles en dos jugadas seguidas, por ejemplo, o un contrataque que parecía una bandeja a placer de Rudy y terminó con un 'aro pasado' que ni tocó la canasta- unido a un CSKA que seguía fuerte en ataque y un gran acierto desde la línea de tres. Krstic, con 19 puntos y Micov, con 14, apuntalaron a un Madrid precipitado al final, inexperto en llegar tan agobiado a los instantes finales. Ahí pagó la novatada y la ‘inmadurez’ a la que hacía referencia Valdemoro: “Una derrota para crecer como equipo”. La próxima vez sabrán que las prisas no ganan un partido. En cualquier caso, no pasa nada. Siguen teniendo la credibilidad intacta... y atendiendo a Valdemoro, aún son más peligrosos.

Ficha técnica

CSKA (23+17+19+26): Teodosic (7), Khryapa (4), Fridzon (11), Krstic (18) y Vorontsevich (14) -quinteto inicial- A. Jackson (8), Kaun (7), Pargo (2) y Micov (14).

Real Madrid (10+20+25+16): Llull (15), Darden (11), Rudy (5), Mirotic (13) y Bourousis (2) -quinteto inicial- Sergio Rodríguez (19), Mejri (4), Reyes (0), Díez (0), Slaughter (2) y Draper (0).

Árbitros: Christodoulou (GRE), Lottermoser (GER) y Latisevs (LAT).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada del grupo F de la Euroliga disputado en el USH Arena de Moscú ante 5.094 espectadores. Bourousis alcanzó los 1.000 rebotes en la Euroliga.