Pablo Laso queda marcado por su excesiva racionalización en el reparto de minutos

La cara de Florentino Pérez en el Mediolanum Forum de Milán tenía fácil interpretación. Acompañado por Ignacio González (Presidente de la Comunidad de Madrid) y Ana Botella (Alcaldesa de la capital), el presidente blanco era la viva imagen de la derrota. Segunda final consecutiva y nuevo fracaso. Una derrota que ha provocado un malestar muy profundo en las oficinas del club, apuntando a Pablo Laso como claro responsable de la derrota.

Durante la temporada regular, el técnico reparte de manera concienzuda los minutos entre los jugadores. Sin embargo, en el club se estima que en una gran final se debe gestionar esta faceta de otra manera. Consideran desde el interior del Santiago Bernabéu que en un partido a cara o cruz no se puedetener en cuenta la táctica que se sigue habitualmente en una Liga o Euroliga.

En el Real Madrid se estima que una vez más, el entrenador no supo gestionar de manera conveniente los ricos recursos de los que dispone. El reparto de minutos volvió a no ser comprendido por los mandatarios madridistas, que consideran que Pablo Laso debió repartir el tiempo de otra manera. No se comprende que algunos jugadores sumaran pocos minutos y, sobre todo, que en determinados momentos, algunos clave para el desenlace de la final, algún efectivo no apareciera en escena.

Otro dato que no se ha entendido fue la participación de Sergio Lllull. El base menorquín se disculpó públicamente tras el partido por su mala actuación -no anotó ni un solo punto-, pero ello no se corresponde con los minutos jugados. Aunque era evidente que no era su noche,Llull jugó 36 minutos. La gran estrella del Real Madrid, a día de hoy, sólo estuvo en pista 22 minutos. Es cierto que Sergio Rodríguez se cargó demasiado pronto de faltas personales, pero fue en el último cuarto cuando desapareció durante varios minutos. Fue reservado por si había prórroga, como así fue, pero en el tramo final no fue tan decisivo como otras veces.

El caso de Felipe Reyes también fue muy comentado en las altas esferas. El gran capitán jugó sólo 17 minutos. Grandes minutos con 12 puntos, siendo artífice de que el equipo se fuera en el marcador en el primer tramo de la final. Con problemas para coger rebotes defensivos en muchos momentos, el Real Madrid echó en falta la fortaleza y la personalidad de Reyes bajo el tablero.

Otro aspecto, y muy importante, es que el Real Madrid echó en falta la figura de un tirador nato. Cuando se lesionó Jayce Carroll, el club comunicó a Laso que el presupuesto ya estaba cubierto. El alero llegó con poco ritmo a Milán y el equipo bien que lo notó. En muchos momentos se echó en falta a un tirador, mientras que Maccabi sí contó jugadores certeros en el lanzamiento.

Markus Slaughter es uno de los jugadores que en la final de Milan no tuvo mucho protagonismo. Apenas nueve minutos en los que anotó dos solitarios puntos. El norteamericano suele disponer de algunos más habitualmente, pero esta vez Laso no contó tanto con él. El jugador tiene todas las papeletas para abandonar el clubla temporada que viene.