Odriozola resiste a los años más negros del atletismo español

Ni los resultados más nefastos de nuestro atletismo en los últimos tiempos han podido con José María Odriozola. El aparente descontento general no se ha plasmado en las elecciones a la presidencia de la Federación. Odriozola ha sido reelegido gracias a una mayoría aplastante (96 votos, por los 44 de Vicente Añó) y cumplirá su séptimo mandato y más de 23 años como máximo mandatario del atletismo español. Tan sólo Carlos Gracia, presidente de la Federación Española de Automovilismo (RFEdA), y Ángel María Villar (RFEF) son más longevos en el cargo; 28 años lleva Gracia, 24 en el caso de Villar.

Las recientes actuaciones en grandes competiciones (fundamentalmente en los Juegos Olímpicos de Pekín y Londres) hacía pensar en un golpe de timón en la RFEA, pero todo ha quedado en agua de borrajas. Añó y grandes nombres en la historia reciente de nuestro atletismo, como Fermín Cacho, Martín Fiz o Jesús Ángel García Bragado, habían conformado o apoyado una candidatura como alternativa al sempiterno Odriozola. Estos apelaban a una nueva forma de dirigir el atletismo español ante el “inmovilismo” del actual presidente. Pero, finalmente, los miembros de la Asamblea han abrazado una vez más el ‘Odriozolismo’.

Como ocurre en el fútbol con Villar, José María Odriozola tiene muy trabajados los votos de las federaciones, a las que mantiene muy satisfechas con el trato que reciben. Numerosos atletas y personal vinculado al atletismo ya advertían antes de estos comicios que iba a resultar “casi imposible” desbancar al actual presidente y que sólo en el caso de que él renunciara al cargo podrían llegar caras nuevas para dirigir este deporte en España.  

Pero los detractores de Odriozola no sólo le achacan los malos resultados deportivos, también hay quienes critican su actitud y pasividad en materia antidopaje. La 'Operación Galgo' no dejó satisfecho a nadie, con muchos lunares y excesivo oscurantismo. Denuncian que la sombra ha planeado, y quizá aún planea, sobre nuestro atletismo sin que el presidente haya mantenido una actuación contundente y acorde a las circunstancias. Tan sólo Alemayehu Bezabeh, atleta etíope nacionalizado español, ha sido sancionado tras confesar que había utilizado sustancias prohibidas. Del resto, nada se sabe.

A sus 73 años, Odriozola seguirá en el cargo y podría cumplir 27 años al frente del cargo de presidente. Sin embargo, hay quienes apuntan que no llegará a Río de Janeiro 2016, que antes preparará su salida. ¿Lo hará dejando preparado el terreno para uno de los ‘suyos’? Para eso aún habrá que esperar un par de años como mínimo. De momento, los impulsores del cambio tendrán que seguir esperando su oportunidad en la oposición y esperar que el nuevo mandato de Odriozola no se parezca en nada a los dos anteriores. Puede que sea una utopía, pero no queda otra.