Mourinho impone su criterio al de la directiva y logra que Pepe siga en el Madrid un año más

José Mourinho es el jefe del Real Madrid. Lo deportivo es parcela suya y lo ha vuelto a demostrar al asegurarse la continuidad de Pepe. El técnico ha conseguido terminar con las dudas de Florentino Pérez y con la indignación de gran parte de los directivos al imponer su idea y dar el 'ok' a la continuidad del ex del Oporto. Y es que el defensa blanco ha estado durante gran parte de la campaña recién terminada más fuera que dentro del Real Madrid. No gusta su comportamiento, pero la opinión del entrenador, a la vez director de fútbol de la primera plantilla, se ha impuesto al resto.

Los diferentes incidentes en los que Pepe se ha visto inmerso durante la campaña (como el pisotón a Messi o la patada a su propio compañeroArbeloa o diferentes celebraciones alejadas de lo deportivo) le sirvieron para tener colgado el cartel de transferible durante muchos meses. No le querían, pero Mourinho ha esperado a que terminara la competición para plantear al triángulo que forma junto al presidente y José Ángel Sánchez la continuidad del central. Los argumentos, sus prestaciones deportivas y que le llevan a estar considerado como uno de los mejores para el técnico madridista y el trabajo psicológico que ha prometido hacer con él.

Florentino Pérez tenía dudas. Confía en el jugador portugués cuando su cabeza está centrada, pero la película es otra bien distinta cuando sufre uno de sus habituales cortocircuitos. Sus reacciones dejan en mal lugar a la entidad y suelen hacer daño deportivo al equipo. No tiene medida y sus violentas reacciones suelen pasar factura. Cuando se quita las botas, todo cambia. Ha prometido cambiar, pero ese anuncio no convence a todos los directivos, que piensan que nunca va a cambiar en su comportamiento.

Presidente y entrenador han decidido dar al central una nueva oportunidad. Han querido prolongar la confianza hacia el expeditivo jugador una temporada más y salvo que aparezca una oferta descomunal (no menos de los 30 millones de euros que costó), Pepe seguirá en el Real Madrid, pero sabe que al siguiente número que monte, tendrá que abandonar la disciplina madridista. Durante la temporada se habló del interés del Chelsea, pero la salida del portugués Villas-Boas parece haber enfriado el interés del club inglés.