Un aliado de Trump quiere convertir un ex cuartel histórico de Belgrado en una nueva 'Torre Trump'

Jared Kushner, yerno del ex presidente estadounidense Donald Trump, y Richard Grenell, ex embajador en Alemania y enviado del político para el diálogo entre Serbia y Kosovo, pretenden construir un complejo de apartamentos y oficinas de lujo al estilo de la Torre Trump en Belgrado, según ha informado la web de noticias POLITICO. En este plan se incluye la demolición del antiguo cuartel general del ejército yugoslavo que fue bombardeado por la OTAN en 1999 y que se mantenía en ruinas como muestra del sufrimiento padecido por los serbios aquellos días. Al familiar y al aliado de Trump no ha parecido importarles mucho. A los serbios bastante más.

No es la primera vez que Trump pone sus ojos en este edificio. Ya en 2013 el propio Donald se reunió con el entonces primer ministro serbio, Ivica Dacic, para discutir la posibilidad de construir un hotel de lujo en este lugar, según informaba el medio Balkan Insight. Entonces Dacic afirmó que era una gran oportunidad para los inversores. Trump todavía no era presidente de EEUU, solo un magnate. Finalmente, aquello en ese momento no salió. Después, han cambiado mucho las cosas.

El antiguo cuartel general del ejército es obra del arquitecto serbio Nikola Dobrovic y consta de dos edificios de unos 50.000 metros cuadrados, construidos entre 1956 y 1965. Se han mantenido en ruinas por falta de dinero y porque con todo su simbolismo se ha convertido en una atracción turística. Y por ese motivo se han quejado los serbios de esta intromisión norteamericana. Además, la indignación tiene mucho que ver con que es un edificio protegido, está en su lista de "patrimonio cultural" desde 2005 y, a priori, no se puede tocar, aunque sí cambiar el interior.

Según las filtraciones publicadas por POLITICO lo que se pretendería construir serían dos torres iluminadas que se elevan telescópicamente hacia el horizonte de Belgrado. Para ellos habría que abolir al menos tres regulaciones distintas, ya que además la ubicación específica en la calle Knez Miloš fue designada para uso exclusivo como centro administrativo o gubernamental desde los primeros planes de construcción urbana para Belgrado en el siglo XIX y no está destinada a proyectos comerciales.

Es un edificio protegido que se ha mantenido en ruinas por falta de dinero y porque con todo su simbolismo es ya una atracción turística

Por otro lado, como señala este medio, a nadie le extraña que detrás de este proyecto esté alguien como Richard Grenell, a quien tildan de político "ruidoso y que irritaba tanto a los funcionarios de la región como al establishment de la política exterior occidental en general". De hecho, recuerdan que sugirió resolver un conflicto entre Serbia y Kosovo por cómo llamar a un lago proponiendo en nombre de "Lago Trump".

En Serbia el bombardeo de la OTAN sigue siendo un tema muy emocional. El pasado marzo se cumplieron solo 25 años y miles de manifestantes acudieron a este edificio a ondear banderas serbias. A los Trump y sus aliados no les importa demasiado. Habrá que ver a los inversores.