Es noticia
Por qué Giorgia Meloni admira a Tolkien (y se ha gastado 250.000 euros en hacerle una expo)
  1. Cultura
ITALIA

Por qué Giorgia Meloni admira a Tolkien (y se ha gastado 250.000 euros en hacerle una expo)

La primera ministra italiana inauguró el miércoles la muestra en Roma organizada por el ministerio de Cultura y dedicada al autor de 'El Señor de los Anillos', escritor de cabecera de la ultraderecha italiana

Foto: La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en la exposición de J.R.R Tolkien en Roma. (La Galleria Nazionalle)
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en la exposición de J.R.R Tolkien en Roma. (La Galleria Nazionalle)

Para la mayoría de los mortales, El Señor de los Anillos es una novela de fantasía épica que escenifica la eterna batalla entre el bien y el mal. Pero para los neofascistas italianos, empezando por la primera ministra Giorgia Meloni, el famoso libro de J. R.R. Tolkien es mucho más: es un potente símbolo de sus creencias políticas, una perfecta alegoría de sus más profundas convicciones ideológicas.

Por eso, no es de extrañar que el pasado miércoles la propia Meloni acudiera a inaugurar en la Galería Nacional de Arte Moderno de Roma la exposición dedicada al escritor británico, convertido a su pesar en emblema de la extrema derecha italiana.

"Es una exposición muy bonita y completa. Aun sabiendo bastante de la materia, he visto muchas cosas que no conocía", decía Meloni tras recorrer entusiasmada durante una hora la exposición, titulada Tolkien. Hombre, profesor, autor, organizada por el ministerio de Cultura italiano en colaboración con la universidad de Oxford y que reúne más de 150 obras entre fotografías, documentos, películas y reconstrucciones virtuales de su trabajo.

Da igual que El Señor de los Anillos fuera considerado en los años 60 un manifiesto hippie, no importa que el propio Tolkien (1892-1973) se pronunciase varias veces durante su vida en contra del fascismo y que criticara sin ambages a Hitler. Para los nostálgicos de Mussolini, esa novela es su biblia, su libro sagrado. Y Tolkien, su profeta.

placeholder Una imagen de J.R.R. Tolkien.
Una imagen de J.R.R. Tolkien.

"Creo que Tolkien puede explicar mejor que nosotros en qué creemos los conservadores", aseguró en cierta ocasión la propia Meloni antes de convertirse en primera ministra. "Yo no considero fantasía El Señor de los Anillos", puntualizó.

El idílico universo rural que describe Tolkien en su libro, repleto de buenos hobbits que defienden su bucólico territorio de los malvados y violentos orcos al servicio de los grandes villanos, se presta efectivamente a interpretaciones ultraderechistas. De hecho, los neofascistas italianos se ven a sí mismos como heroicos luchadores que defienden su territorio de las hordas de inmigrantes y de los oscuros poderes que gobiernan el mundo.

placeholder Imágenes de orcos en la serie 'Los anillos del poder'. (Amazon)
Imágenes de orcos en la serie 'Los anillos del poder'. (Amazon)

Esa posible interpretación alimenta desde hace tiempo debates académicos sobre los posibles prejuicios raciales e ideológicos de Tolkien, quien en 1977 ya fue descrito por Humphrey Carpenter en su biografía sobre el escritor como "un hombre de derechas. Honraba a su rey y a su país y no creía en la capacidad del pueblo para gobernar". Pero en ningún lugar el culto de la ultraderecha hacia Tolkien ha alcanzado las dimensiones que ostenta en Italia.

Son numerosas las muestras de admiración que Giorgia Meloni ha prodigado a Tolkien. Hace ya ocho años, mientras recordaba a Giorgio Almirante (fundador del partido fascista Movimiento Social Italiano), Meloni lanzó un llamamiento a luchar "contra ese enemigo sutil que Tolkien llamaría el anillo del poder".

En 2008, cuando era ministra de la Juventud del gobierno presidido por Silvio Berlusconi, posó para una revista junto a una estatua de Gandalf, el mago bueno que ayuda a los habitantes de la Tierra Media en su lucha contra el señor oscuro Sauron. Y el año pasado se quejó de que la campaña electoral que culminó con su victoria y su nombramiento como primera ministra de Italia la había impedido seguir los episodios de Los Anillos del Poder, la serie de Amazon Prime sobre El Señor de los Anillos.

Meloni acudió en 1993 a uno de los Festivales Camp Hobbit, en los que los jóvenes neofascistas reverenciaban a Tolkien

Cuando tenía 21 años, y ya llevaba seis de militancia política, Meloni se presentaba a sí misma en los foros de debate de internet con el alias de "Khy-ri, la pequeña dragona de Italia". Por no hablar de su participación en los llamados Festivales Camp Hobbit, unas concentraciones en las que los jóvenes neofascistas reverenciaban a Tolkien, usaban como alias nombres de personajes de El Señor de los Anillos, ondeaban al viento banderas con la cruz celta y coreaban canciones como El mañana nos pertenece, que acabaría convirtiéndose en himno del Frente Juvenil.

placeholder Giorgia Meloni, jugando en una máquina pinball de 'El Señor de los Anillos' en la exposición de Tolkien en  Roma. (La Galleria Nazionalle)
Giorgia Meloni, jugando en una máquina pinball de 'El Señor de los Anillos' en la exposición de Tolkien en Roma. (La Galleria Nazionalle)

Meloni acudió en 1993 a unos de esos festivales neofascistas de exaltación tolkiana, que empezaron a celebrarse en 1977 y a través de los cuales los símbolos de la Tierra Media han ido poco a poco sustituyendo a los viejos emblemas fascistas.

En alguna ocasión, Meloni ha asegurado que los enanos, los elfos y los hobbits de El Señor de los Anillos le han enseñado el "valor de la especificidad", el hecho de que "cada uno es indispensable por ser particular". Una idea que con frecuencia ella ha empleado para defender la importancia de la identidad nacional frente a la unidad europea. ​Y ahora, su Gobierno celebra a Tolkien con una exposición que ha costado 250.000 euros.

Para la mayoría de los mortales, El Señor de los Anillos es una novela de fantasía épica que escenifica la eterna batalla entre el bien y el mal. Pero para los neofascistas italianos, empezando por la primera ministra Giorgia Meloni, el famoso libro de J. R.R. Tolkien es mucho más: es un potente símbolo de sus creencias políticas, una perfecta alegoría de sus más profundas convicciones ideológicas.

Giorgia Meloni Noticias de Italia
El redactor recomienda