Antonio Baños, de las canciones para niños al independentismo catalán

Noche previa al Día D. Jornada de reflexión del 27-S. ¿Qué hacer antes de la cita electoral? Dar un concierto. Antonio Baños es el nombre más repetido en los últimos días. El hombre de moda en Cataluña. Número uno de la CUP, la persona que puede decidir quién será el nuevo presidente de la Generalitat tras el compromiso de su partido de no apoyar la investidura de Artur Mas, periodista y rockero. ¿Quién da más?

Baños acaba de crear Contratroika, un grupo de música junto a David Fernández (también de la CUP) y el poeta David Caño, con el que debutó el pasado sábado en la jornada de conciertos organizada en la sala BeCool de Barcelona bajo el nombre La República catalana será pop o no será. Pero antes, en 1989, formó junto a sus compañeros de la facultad de Ciencias de la Información, Nacho Gil, Xavi Martín y Rafa Tapounet, Los Carradine. Este grupo -en el que Baños es guitarrista y cantante- destacó en la escena barcelonesa entre 1993 y 1998. Publicó cuatro maquetas y fue telonero de Steve Wynn. Tras disolverse, se volvieron a reunir en 2004 y en 2007 salió al mercado su primer álbum: 'Sospechoso tren de vida'. Su última actuación, por sorpresa, fue el sábado.

Muchos les conocen por las irónicas y políticas letras de temas como 'Vietnam sentimental', 'Billy Bragg' o 'La clase obrera', pero lo que pocos sabían es que había por ahí un disco perdido de canciones infantiles que ahora, aprovechando el tirón mediático del político independentista catalán, sale a la venta en vinilo y se puede escuchar en 'streaming'.

'Academia Rocanrol' nació como un disco-libro en 2008 pero quedó en un cajón porque no se terminaron las ilustraciones. Hace unos meses el grupo decidió colgar online el disco para que no muriera el sueño de los justos y el sello independiente Bobo Integral les ofreció editarlo en formato físico con ilustraciones de Esther Burgueño y Juanjo Sáez.

Los Carradine repasan los sonidos y nombres propios de la historia del rock para toda la familia con temas como 'La vida de Brian', 'La familia Beatle' o 'Los hermanos Ramone'. Lo hacen a través de las historias de los chavales de este academia como la de Rosa Clash, una niña punk de 5º B, que salva a su clase de los zombies poniéndose a cantar, las chicas rockeras que salen al patio "porque el rock es para jugar", el caso del pastelero Elvis que canta para conquistar la libertad o de Iggy, el perro de los Dylan.

El disco está muy en la onda de la música de corte indie y rockera que se hace en los últimos años para el público infantil. Letras sobre el miedo a que te marginen en clase, que animan a hacer fiestas en casa cuando los padres se han ido porque "no hay fiesta si el vecino no protesta", a no callarse o que reivindican el derecho al error ("cada uno es uno mismo al hacer las cosas mal (...) al equivocarse hay quien lo llama personalidad"). Engancha, es gamberro y divertido y no, no busquen consignas políticas porque es un cuento que se desarrolla en 11 temas que consigue con facilidad que los mayores inoculen y compartan su pasión por el rock a los pequeños.

El grupo de Baños ha tocado de vez en cuando estas canciones en sus directos -de hecho, hay varios videoclips de los temas del álbum- y han actuado para niños en conciertos en el festival Animac de Lleida o el Minimúsica Primavera Sound [arriba un vídeo de una actuación en el festival en 2007 vestidos de abejas coreando el "que no pasará el gran circo liberal" de 'Billy Bragg'].