"Las melodías de Makeba dieron voz al exilio sudafricano"

Nelson Mandela ha mostrado su tristeza por la repentina muerte de la cantante Miriam Makeba, cuyas "hechiceras melodías pusieron voz al dolor del exilio" que vivió durante 31 años, según recuerda el ex presidente sudafricano y Premio Nobel de la Paz. "Muchas décadas, años antes de que yo fuera a prisión, 'Ma Miriam' ocupó un lugar importante en nuestras vidas y disfrutamos de sus conmovedoras actuaciones", indica Mandela en un comunicado, en el que señala que su música "inspiró un sentimiento de esperanza en todos nosotros", los sudafricanos.

 

Para él, pese al "tremendo sacrificio y dolor" que supuso para la cantante salir al exilio, "continuó haciéndonos sentir orgullosos al utilizar su fama mundial para atraer la atención sobre la abominación del 'apartheid'", contra el que Mandela luchó hasta su desaparición en 1994, cuando fue elegido presidente.

Cuando regresó a Sudáfrica, el 10 de junio de 1990, "siguió usando su nombre para promocionar músicos y apoyar la lucha de las mujeres", señala Mandela, que cuenta que uno de sus últimos proyectos estaba dirigido a la ayuda a las víctimas de las minas antipersonal. Mandela asegura que "ella fue la primera dama sudafricana de la canción y ostentó con sobrado merecimiento el título de 'Mama Afrika', pues fue una madre para nuestra lucha y nuestra joven nación". "Ha sido muy propio de ella que sus últimos momentos los viviese sobre el escenario, enriqueciendo los corazones y vidas de otros y, nuevamente, en apoyo de una buena causa", concluye la nota de Mandela.

Miriam Makeba falleció ayer, a los 76 años de edad, en la localidad de Castel Volturno, en el sur de Italia, a causa de un paro cardiaco tras un concierto contra el racismo y la mafia. Makeba, que cantó en el concierto organizado por el escritor italiano Roberto Saviano, amenazado de muerte por la Camorra, se sintió mal al término del espectáculo y fue trasladada a una clínica, donde sufrió esta madrugada una crisis cardiaca que finalmente acabó con su vida.