Es noticia
Cebrián carga contra el Gobierno justo antes de pedir ayudas para la prensa
  1. Comunicación
EL GRUPO ADMITE PÉRDIDAS DE 7,6 MILLONES EN 2009

Cebrián carga contra el Gobierno justo antes de pedir ayudas para la prensa

El Gobierno, la Comisión Nacional de Competencia (CNC), la Secretaría de Estado del Deporte, la Liga de Fútbol Profesional (LFP)… Para todos tuvo ayer Juan Luis

El Gobierno, la Comisión Nacional de Competencia (CNC), la Secretaría de Estado del Deporte, la Liga de Fútbol Profesional (LFP)… Para todos tuvo ayer Juan Luis Cebrián, consejero delegado de Prisa, durante la Junta del grupo de medios celebrada ayer. ¿Su primera diana? El Ejecutivo, por su cercanía a Mediapro en pleno fragor de la guerra del fútbol. “La intervención de este Gobierno, con sus numerosas decisiones de urgencia (…), no ha hecho sino generar un caos formidable en todo el sector, perjudicando a propios extraños. La sospecha de que dichas decisiones han venido orientadas por el favoritismo o el clientelismo son públicas”, aseguró sin ambages a los accionistas.

 

Apenas dos minutos después de hacer amigos, el máximo ejecutivo de la compañía sugería la necesidad de ayudas para los periódicos. “Es de lamentar la pasividad de los partidos políticos mayoritarios en nuestro país a la hora de implementar una legislación que ayuda a la prensa escrita a descubrir un futuro más prometedor que el que se le anuncia”, subrayó, dejando claro que no hablaba en nombre de El País, “que gana dinero”, sino del sector.  En esta línea, acuso a los políticos de no “acudir a su sostenimiento como no sea desde el clientelismo, el sectarismo o el servilismo”. Aunque es cierto que el diario está en números negros, los accionistas aprobaron ayer unas pérdidas en el ejercicio para el conjunto del grupo de 7,6 millones de euros.

Cebrián aprovechó una Junta descafeinada –al no llegar a tiempo para su aprobación el salvador acuerdo con la sociedad americana Liberty Acquistion Holdings Corp– para sacar pecho en la guerra con Roures. Exhibió el as del pago de los 90 millones por el primer plazo de los derechos para la Liga del año próximo y anunció que ha pedido a la administración concursal de Mediaproducción que le entreguen a AVS, filial de Sogecable, los derechos del futbol “que le pertenecen”, según la sentencia de un juzgado de Madrid. En todo caso, insistió en la necesidad de introducir orden en la competición, “algo en lo que el Gobierno y la Secretaria de Estado del Deporte, así como los propios clubes a través de la Liga de Fútbol Profesional tienen mucho que decir y hacer”.

Y lo dirán a tenor de la capacidad de influencia del todopoderoso consejero delegado de Prisa. Por la mañana, Cebrián criticaba la tardanza de la CNC en dar luz verde a los expedientes de venta de Cuatro a Telecinco y del 22% de Digital Plus a Mediaset. “Estoy seguro de que tanto los servicios técnicos de la CNC como sus responsables políticos han de ser sensibles a las urgencias que se derivan en operaciones como las que comentamos. (…) En coyunturas como esta es preciso que todas las instancias actúen con celeridad a fin de no dañar el tejido productivo de las empresas”. Dicho y hecho, Por la tarde la propia compañía anunciaba que los expedientes habían pasado a la segunda fase sin agotar el plazo previsto para la primera, que se agotaba el 12 de julio.

La familia da un paso atrás

Las críticas al Gobierno dejaron en segundo plano otras duras realidades de la Junta. Por ejemplo, el simbólico adiós al Consejo de Javier Díez Polanco, sobrino del fundador, que en mayo de 2009 abandonaba sus cargos en Sogecable. Poco después era Jaime Polanco quien dejaba la compañía. En ambos casos las diferencias con Cebrián eran notorias. Siguen Ignacio y Manuel Polanco, pero su dilución con la entrada de Liberty será espectacular. El propio Cebrián, que ha acordado con los americanos su continuidad al menos tres años como consejero delegado, recordó ayer que el grupo accionarial de referencia va a verse diluido desde el 70% que ahora controla a un tercio de los derechos políticos de voto.

El propio Ignacio, presidente de Prisa, hizo un esfuerzo para comunicar a los accionistas, con un tono que revelaba más resignación que convicción, “el firme compromiso personal y de mi familia con este acuerdo”,  haciendo hincapié en “el sacrificio que supone para todos”. Fuentes de toda solvencia consultadas por este diario aseguraban que los accionistas históricos de Prisa ya cuentan con que su porcentaje accionarial quede claramente por debajo del 30%. Pocas dudas ahí de que la compañía entra en una nueva etapa, la era Liberty. Sobre todo después de que se mejore el acuerdo para facilitar la entrada de los accionistas de la sociedad americana, que aún tienen que dar luz verde a la operación.

Y es que al actual precio de la acción del grupo de medios española –que cerró ayer en 2,025 euros- a los fondos integrados en Liberty les compensa más la disolución de la sociedad –constituida en 2007- y recibir su dinero de vuelta que entrar en Prisa. Según el comentario efectuado ayer por JB Capital Markets, “el precio de break-even estaría entre 2,5-2,6 euros por acción, teniendo en cuenta la última revisión de la oferta y el cambio euro dólar. Un precio todavía lejano de los actuales niveles de precios de la acción de Prisa”. La mejora de las condiciones anunciadas la semana pasada por uno de los fundadores de Liberty, Martin E. Franklin, podría llevar ese precio de equilibrio a los 2,30 euros por título. Sea como fuere, ambas partes dan por hecha la transacción.

No falta quien dentro de la compañía critica con dureza la falta de acción de la familia Polanco, que como el propio Cebrián recordó hace año y medio concedieron al actual consejero delegado toda la capacidad ejecutiva en la sociedad. “Entendieron entonces los accionistas que era necesario asegurar la unidad de decisión”, subrayó, al tiempo que se desentendía de algunas de las decisiones que llevaron al grupo a una deuda que a 31 de diciembre de 2009 rondaba los 5.000 millones de euros. “La debilidad de nuestra estructura financiera (…) se debe exclusivamente al hecho de que el crecimiento considerable que ha experimentado el grupo en los últimos años se financió con préstamos bancarios (…) Muchas otras empresas se encuentran en parecida situación”, dijo, sin referencia alguna a operaciones más que discutibles como la opa por el 100% de Sogecable.

Preguntado por si la apuesta por Le Monde podía ser igualmente cuestionable, Cebrián dijo que Prisa simplemente está haciendo valer sus derechos como accionista. “Tenemos derecho de retracto o de veto” en función de nuestra inversión, subrayó el factótum de Prisa, que cuestionó la transparencia del proceso. France Telecom, que abanderaba la oferta del grupo español, retiró su oferta esta semana debido al rechazo de la Sociedad de Redactores del periódico.

El Gobierno, la Comisión Nacional de Competencia (CNC), la Secretaría de Estado del Deporte, la Liga de Fútbol Profesional (LFP)… Para todos tuvo ayer Juan Luis Cebrián, consejero delegado de Prisa, durante la Junta del grupo de medios celebrada ayer. ¿Su primera diana? El Ejecutivo, por su cercanía a Mediapro en pleno fragor de la guerra del fútbol. “La intervención de este Gobierno, con sus numerosas decisiones de urgencia (…), no ha hecho sino generar un caos formidable en todo el sector, perjudicando a propios extraños. La sospecha de que dichas decisiones han venido orientadas por el favoritismo o el clientelismo son públicas”, aseguró sin ambages a los accionistas.

Juan Luis Cebrián