Los Polanco perderán la mayoría de Prisa con la entrada de un 'pool' de fondos americanos

El Grupo Prisa prepara la entrada en su capital de un ‘pool’ de fondos americanos que podría aportar a la compañía entre 650 y 725 millones de euros, lo que reduciría el porcentaje de los Polanco en la sociedad al entorno del 35%. Actualmente, la familia atesora un 70% del grupo de medios a través de la patrimonial Rucandio. El rechazo de los hijos del fundador a perder la mayoría había frenado otras operaciones para entrar en la matriz, pero la naturaleza financiera de esta operación –seguirán mandando- y la necesidad de resolver de una vez por todas los apuros económicos de la compañía habrían terminado por hacerles hincar la rodilla. La CNMV suspendió cautelarmente la cotización de la compañía, "por concurrir circunstancias que pudieran perturbar el normal desarrollo de las operaciones sobre los citados instrumentos financieros".

 

Según aseguran a El Confidencial fuentes financieras conocedoras de la operación, se trata de “una agrupación de más de 30 fondos de inversión estadounidenses, con dos o tres accionistas individuales. Las negociaciones están encauzadas, y los bancos lo sabían”. Eso explica que Prisa anunciara ayer un acuerdo con sus entidades acreedoras para aplazar hasta 2013 el vencimiento del crédito puente de 1.900 millones de euros solicitado a finales de 2007 para financiar la opa por el 100% de Sogecable. El deadline era marzo. Las acciones de Prisa se situaron ayer en 3,55 euros, para una capitalización de 778 millones de euros.

 

El grupo de comunicación ha confirmado hoy mediante un hecho relevante enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que se "encuentra en conversaciones con sus bancos acreedores para la reestructuración de su deuda financiera. También confima que en los últimos meses se han mantenido conversaciones con distintos grupos y que puede llegar a un acuerdo con un grupo de inversores internacionales interesados en participar en el capital social de la compañía".

 

“La ampliación de capital en ciernes explica la luz verde de los bancos a la reestructuración de la deuda. El anuncio de que el crédito sindicado también se reestructura está próximo a producirse”, apuntan estas fuentes, que recuerdan que la deuda total de Prisa rozaba a finales de 2009 los 5.000 millones de euros. La operación obligará al grupo de medios español a afrontar una serie de inversiones en radio y televisión en Estados Unidos que saldrán de cash-flow y que podrían estar entre los 350 y 400 millones. Prisa ya puso un pie en el mercado norteamericano con la adquisición a finales de octubre de un 12% de la cadena hispana Vme.

 

“Es probable que consigan entre 650 y 725 millones de euros, cuando el mínimo exigido por los bancos para reestructurar la deuda era de 350 y 400”, añaden estas fuentes. Según ya ha apuntado este diario, Prisa busca desde hace meses posibles inversores americanos de la mano de Violy de Harper, ex JP Morgan durante el caso Banesto, buena conocedora de ese mercado desde su asesoría neoyorquina y próxima a Matías Cortés, consejero de Prisa. Según señalan fuentes internas de Prisa, “los integrantes de esa agrupación de inversores no tienen vínculos entre sí y no insisten en tomar el poder o participar activamente en la gestión”, lo que habría facilitado el placet de los Polanco a diluirse en una operación liderada por Juan Luis Cebrián.

 

Prisa lleva meses cortejando la entrada de dinero fresco. Ya en octubre el grupo de medios acariciaba la posibilidad de que el magnate venezolano Gustavo Cisneros entrara en el capital con entre 300 y 350 millones de euros. Fuentes de la compañía aseguraron en su momento que la cantidad era demasiado elevada incluso para el todopoderoso empresario latinoamericano, que no habría cerrado la financiación. Desde el Grupo Cisneros se ha negado siempre a este periódico cualquier tipo de negociación, aun admitiendo su interés por el mercado español.

 

Bajar la deuda en 2.000 millones

 

La llegada de un socio de envergadura al capital de Prisa es una de las principales condiciones impuestas a la familia Polanco para la reestructuración de la deuda. A la que hay que añadir el proceso de desinversiones acometido en los últimos meses por la compañía para hacer frente al ‘roto’ económico. Primero fue el acuerdo para la venta del 25% de Santillana al fondo DLJ South American Partners por 247 millones. Después la desinversión en Media Capital, su filial portuguesa; colocó un 35% por 157,5 millones al grupo luso Ongoing Strategy Investments. Finalmente, la venta a Mediaset de Cuatro y de un 22% de Digital Plus podría proporcionar a los Polanco 1.050 millones de euros, 500 inminentes y en efectivo. Si se cierran todas las operaciones, Prisa podría ingresar más de 2.000 millones de euros.

 

Eso sí, todas son operaciones a culminar en 2010. Y es que la deuda total de Prisa, que alcanzaba a finales de 2008 los 5.142 millones de euros, no se redujo significativamente en 2009, a tenor de los resultados presentados por el grupo el pasado viernes. El agujero se habría quedado en el pasado ejercicio en 4.857 millones. Según explican a El Confidencial fuentes internas de Prisa, las desinversiones no se han ejecutado todavía, precisamente porque faltaban waivers de los bancos y permisos de las autoridades de Competencia. “Sin embargo, los únicos reparos de las entidades financieras es quién se lleva los fondos antes, si los integrantes del préstamos sindicado o los del puente”.

 

De hecho, según el comunicado hecho público ayer por Prisa, la reestructuración del crédito puente queda a expensas del visto bueno de los bancos acreedores del préstamo sindicado. Ampliar los plazos del primero era más urgente, en tanto marcaba los vencimientos a corto plazo de la empresa, que en total ascendían a 2.532 millones a 31 de diciembre de 2008. Prisa había logrado el 14 de mayo pasado un acuerdo con HSBC, BNP Paribas, Natixis, La Caixa, Banesto y Caja Madrid para extender hasta el 31 de marzo de 2010 el vencimiento de ese crédito. Entonces ya puso como garantías Santillana, Sogecable y Media Capital.

 

Además de esos vencimientos a corto, los Polanco tiene en el horizonte otros 2.532 millones a largo plazo, la mayoría también con vistas a 2013. Ahí la parte del león se la lleva el préstamo sindicado suscrito en junio de 2007 con 39 entidades financieras por más de 2.000 millones. En el presente ejercicio le vencen más de 200 millones de euros.

 

En todo caso, como se avanzó desde estas páginas, la situación este año no iba ser tan angustiosa como el pasado. Las desinversiones y el interés de los bancos en cobrar, aunque sea tarde, han facilitado las cosas. “Si no llegan a todo, se les darán seis meses más y se les subirá un puntito para apretarles, pero no habrá problemas”, aseguraban entonces fuentes financieras.