Una española que vive en Estados Unidos enseña lo distintas que son las farmacias en este país

Una ciudadana española residente en Estados Unidos ha compartido su experiencia sobre una faceta poco explorada, pero reveladora, de las diferencias culturales entre ambos países: el singular universo de las farmacias americanas.

A través de su relato, Rocío Jiménez nos invita a descubrir, a través de TikTok, cómo se vive la experiencia de comprar medicamentos en una nación donde la salud y su gestión tienen un enfoque muy distinto al español.

La travesía comienza en una sucursal de CVS, cadena de farmacias de renombre en EE.UU. Lo primero que destaca es la posición del farmacéutico, situado al final del establecimiento, guardián de los medicamentos que requieren receta médica.

Frente a esto, nos encontramos con pasillos abarrotados de productos disponibles sin prescripción. "Por cierto, dice que dan consejos, pero ya os digo yo que es muy probable que el farmacéutico en cuestión, te mande al médico", señala nuestra guía, desmitificando la idea del farmacéutico como primer consultor de salud.

Diferencias notables

La oferta de medicamentos de venta libre es vasta e incluye desde tratamientos para dolores de cabeza, limitados a dosis sin receta de hasta 500 mg, hasta una amplia gama de soluciones para problemas estomacales y síntomas de resfriado y gripe. Además, el surtido se extiende a cremas, sprays para aliviar picores, e incluso "diferentes artilugios para dormir", como pastillas y gominolas diseñadas para favorecer el descanso nocturno.

Este relato subraya no solo las disparidades en la atención farmacéutica entre España y Estados Unidos, sino también la riqueza que supone entender cómo algo tan cotidiano como adquirir medicamentos refleja el choque cultural y las diferentes maneras de enfocar el cuidado de la salud. La narrativa de nuestra protagonista se entrelaza con su proceso de adaptación, evidenciando las complejidades que enfrentan aquellos que se aventuran a vivir fuera de su país natal.

Una ventana cultural

Esta incursión en el mundo de las farmacias estadounidenses nos demuestra que los detalles cotidianos pueden ser un espejo de las grandes diferencias culturales. A través de los ojos de una expatriada, comprendemos que adaptarse a una nueva realidad implica enfrentarse y asimilar las particularidades de una sociedad distinta.

La española concluye su exploración con una mezcla de asombro y aceptación, reflejando la experiencia de muchos expatriados que, día a día, descubren las singularidades de vivir en Estados Unidos.

Así, nos queda claro que detrás de cada estante de medicamentos sin receta y cada indicación del farmacéutico, hay historias de adaptación, sorpresa y aprendizaje. Estas anécdotas, más allá de revelar las diferencias entre dos sistemas de salud, nos invitan a acercarnos con curiosidad y empatía a las diversas formas de entender el mundo y cuidarnos unos a otros.