Mezclar estos productos de limpieza podría intoxicarte o quemarte: estas son las advertencias de una sanitaria

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Para desinfectar y eliminar la suciedad en el hogar, cuentas con una gran variedad de productos de limpieza: lejía, amoniaco, vinagre, bicarbonato, lavavajillas, etc. Cada uno indicado para un tipo de superficie o mancha que permite dejar toda la casa sin gérmenes y reluciente. Sin embargo, a la hora de usarlo hay que tener en cuenta sus compuestos químicos y algunos abrasivos, sobre todo si decides mezclarlos. Una sanitaria ha advertido sobre las consecuencias peligrosas en la salud si la combinación no es la adecuada.

Quizás la mayoría conozca los efectos dañinos de mezclar lejía con amoniaco, pero no son los únicos productos de limpieza que pueden provocarte quemaduras o intoxicarte. Esther Samper, médica y Doctora en Ingeniería Tisular Cardiovascular, ha alertado a través de su cuenta de Twitter de varias mezclas tóxicas que "liberan sustancias tóxicas, perjudiciales para la salud".

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El Confidencial

Qué productos no debes mezclar

La lejía junto al amoniaco produce un gas altamente tóxico llamado cloramina, que si lo inhalas te puede causar daños severos en el sistema respiratorio y pueden notar ardor en los ojos. También puede provocarte daño en los ojos, así como en la piel, pulmones, riñones, hígado y sistema nervioso, la lejía mezclada con alcohol en gel que puedes usar para desinfectarte las manos.

Por lo general, la lejía es mejor emplearla de forma individual sin añadir más productos. Tampoco se puede usar con vinagre, ya que el ácido de este condimento genera un gas tóxico conocido como cloro que puede provocar quemaduras graves en los ojos y en las vías respiratorias. Quizás a muchos les sorprenda, pero no la combines con el lavavajillas para lavar los platos. Aunque de primera pueda resultarte una buena idea para quitar toda la suciedad incrustada, también desprende gas cloro.

También debes tener cuidado cuando la uses con agua, siempre debe ser fría. Como expone la médico, si se diluye lejía con agua caliente, además de no desinfectar porque se evapora el cloro, genera emanaciones que pueden causar intoxicación e irritación en las mucosas.

Además de desprender gases nocivos, hay otras mezclas que pueden provocar una explosión. Al mezclarse lejía y agua oxigenada forman cloratos o percloratos, utilizados en explosivos. Los cloratos por una reacción exotérmica, que genere calor, podrían provocar la explosión. Lo mismo ocurre si incluyes bicarbonato y vinagre en un recipiente cerrado.