¿Cuál es el color más popular en el mundo?

Los colores son una de esas cosas determinantes en el mundo humano. Tan inofensiva su existencia, o lo que nuestros ojos pueden captar de esta, resultan auténticos principios de muchas inercias y dinámicas en la historia de la humanidad. Los colores, ese reflejo de luz, nos reflejan, y si las personas son tan diversas y distintas, los colores lo son aún más. Cada persona es un mundo y para gustos los colores, esta podría ser la clave de la existencia misma.

Tanto es así que las preferencias sobre un color u otro están muy influenciadas por cada tiempo y cada cultura. Cada uno, con muy diversos significados, pueden situarse en mayor o menor medida presentes entre las civilizaciones y, más concreto aún, entre cada grupo social. En 2019, un estudio publicado en la revista 'Perception' comparó los tonos favoritos de las personas en las culturas polaca, papú y hadza (un grupo de cazadores-recolectores que vive en Tanzania). Lo que encontraron es que cada una de las tres culturas elegía colores muy diferentes entre sí.

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Incluso dentro de la misma cultura, las experiencias de vida y la socialización pueden dar forma a la preferencia de color. Por ejemplo, en la cultura occidental moderna, el azul se asocia tradicionalmente con los niños, mientras que el rosa se considera un "color de niña". A partir de ellos se han ido retorciendo diferentes estereotipos de género que acaban marcando a esos niños y niños. Para un estudio de 2013 publicado en la revista 'Archives of Sexual Behavior' un grupo de investigadores encuestó a 749 mujeres y hombres adultos estadounidenses. Sorpresa, los hombres tendían a preferir el azul, mientras que las mujeres tendían a preferir el rojo, el morado o el rosa.

En el mito del rosa versus azul

Una división de género que durante mucho se acentuó aún más en familias con hijos únicos; en otras palabras, el estudio observó que los hombres que solo tenían hijos varones preferían el azul con más determinación que los hombres que tenían hijas.

Sin embargo, más allá de esa idea de género construida, lo cierto es que el tono favorito de la humanidad no es constante, nunca lo ha sido y probablemente nunca lo será. Ya está, asunto resuelto. No obstante, la cuestión no acaba ahí. Unos años antes del estudio mencionado, en 2015, una encuesta llevada a cabo por 'YouGov', descubrió que en ese momento sí había un color estrella, vamos a decir. Era, sorpresa, el azul.

Eso sí, parece que por poco tiempo, porque en 2017 el panorama algo cambiaba: una encuesta de 30.000 personas de 100 países distintos señalaron entonces que el verde azulado profundo era el color más popular, según recogió el periódico británico 'The Independent'. Vamos, que la respuesta parece variar según el año, el método de encuesta y la población muestreada.

Lenguaje y cultura

No era nada nuevo, ya que 1970, los investigadores del 'World Color' ya habían detectado esto, así que llevaron a cabo una encuesta para la que recogieron los términos de color en 110 idiomas no escritos de todo el mundo. El objetivo era probar la hipótesis, articulada por el lingüista estadounidense Benjamin Lee Whorf en 'MIT Technology Review', de que "diseccionamos la naturaleza a lo largo de las líneas establecidas por nuestro idioma nativo".

Aquella encuesta encontró que en todas las culturas, las personas tendían a nombrar los tonos de la misma manera. Por ejemplo, los diferentes tonos que en inglés se agrupan cerca de lo que en español entendemos como "azul", es probable que en tagalo, turco o tayiko, esos mismos tonos se describan con una palabra que se traduce aproximadamente igual. De hecho, en todas las culturas, los hablantes tienden a colocar el límite entre los colores fundamentales (rojo, azul, amarillo y verde). Así que el punto donde el azul se funde con el verde o el amarillo con el naranja, se entiende igual en todas las culturas.

Mientras la percepción y categorización de los colores parece ser bastante universal, a través del lenguaje, el desarrollo de estos no ha sido el mismo entre grupos humanos alejados geográficamente o no. En occidente, seguimos lidiando con los complejos arraigados sobre el rosa y el azul, pero al mismo tiempo, entre los hadza, cuya sociedad es bastante igualitaria, las preferencias de color son prácticamente idénticas entre hombres y mujeres.