Es noticia
La nueva parte anatómica del músculo masetero sin la que no podríamos masticar
  1. Alma, Corazón, Vida
"MUSCULUS MASETER PARS CORONIDEA"

La nueva parte anatómica del músculo masetero sin la que no podríamos masticar

Un equipo de científicos suizos descubren una tercera parte muscular involucrada en el movimiento de mandíbula que hasta ahora se había pasado por alto

Foto: Foto: iStock.
Foto: iStock.

Pensamos que lo sabemos todo sobre el cuerpo humano. La ciencia y la tecnología han avanzado tanto que nos han permitido asomarnos a las partes más ínfimas de nuestra anatomía y a las más grandes de nuestro cosmos. Sin embargo, todavía hay grandes misterios ahí fuera sobre todo (arriba, en el espacio) y aquí dentro (en nuestro propio cuerpo).

Uno de los descubrimientos anatómicos más recientes es el de una capa muscular dentro del músculo masetero, localizado en la mandíbula y el responsable de que podamos abrir y cerrar la boca para masticar. Por el momento, se sabía que este músculo contenía una capa más superficial y otra más profunda, pero no ha sido hasta ahora cuando han localizado una tercera que resulta esencial a la hora de realizar el movimiento de mandíbula.

"Esta es la única parte del masetero que puede mover la mandíbula hacia atrás"

Un equipo de científicos del Departamento de Biomedicina de la Universidad de Basilea, en Suiza, ha hallado una "tercera capa anatómicamente distinta" del músculo masetero. Esta parte es muy profunda, y va desde la proyección ósea que da forma a los pómulos y que podemos notar en las inmediaciones de la oreja cuando hacemos presión, hasta la apófisis coronoides, otro hueso con forma triangular localizado en la mandíbula inferior.

Para dar con ello, los científicos diseccionaron doce cabezas de cadáveres humanos conservadas en formol, así como también tomaron tomografías computarizadas de cadáveres más recientes para después revisar los resultados con una resonancia magnética de un sujeto vivo. El estudio, publicado en la revista 'Annals of Anatomy' el día de Nochebuena del año pasado, es decir, hace apenas unos días, ha servido para refrendar la hipótesis de artículos anteriores que mencionan la existencia de una tercera capa muscular en el masetero, la cual no había sido identificada hasta ahora.

Una parte vital para masticar

"Esta sección profunda del músculo masetero se distingue claramente de las otras dos capas en lo que se refiere a sus dimensiones y función", asegura Szilvia Mezey, autora principal del estudio, en un artículo de 'Live Science'. "Según la disposición relativa de las fibras musculares, es probable que esta capa ayude a estabilizar la mandíbula inferior al 'elevar y retraer' el proceso coronoide. De hecho, es la única parte del masetero que puede mover la mandíbula hacia atrás o que se retrotraiga".

"Aunque generalmente asumimos que la investigación anatómica de los últimos cien años no ha dejado nada, nuestro hallazgo ha sido para nosotros como el de un zoólogo que de repente descubre una nueva especie de vertebrado", asevera Jens Christoph Türp por su parte, uno de los miembros del equipo de Mezey. A esta nueva parte del masetero la bautizaron "Musculus maseter pars coronidea", que significa "parte coronoide del masetero".

Foto: Brazo izquierdo de la princesa Louise en 1848. Fuente: Royal Collection Trust

Evidentemente, no se trata de un músculo fundamental para la vida humana, pero estos hallazgos pueden ayudar muchísimo en el proceso clínico de afrontar cirugías en esta región de la mandíbula, así como para tratar de una manera más eficaz cualquier tipo de afección o enfermedad que pueda surgir en esta articulación que une nuestra mandíbula con el cráneo y, por la cual, podemos masticar alimentos y con ello nutrirnos.

Pensamos que lo sabemos todo sobre el cuerpo humano. La ciencia y la tecnología han avanzado tanto que nos han permitido asomarnos a las partes más ínfimas de nuestra anatomía y a las más grandes de nuestro cosmos. Sin embargo, todavía hay grandes misterios ahí fuera sobre todo (arriba, en el espacio) y aquí dentro (en nuestro propio cuerpo).

Ciencia
El redactor recomienda