Voluntarios ayudan a un hombre de Iowa a poner su tradicional iluminación navideña
"Perdió la capacidad de movimiento en el lado derecho durante unos tres días"
Un barrio de Des Moines, en Iowa (Estados Unidos), acoge cada año a multitud de gente de los alrededores que llega en "coches", "autobuses" y "limusinas" al lugar "solo para ver las luces", ha contado a FOX News Julie Marks, residente en la calle Ashby. Asegura que "entrar en este vecindario es como introducirse en un libro de fantasía".
El marido de esta mujer, Dale Marks, aprovecha la llegada de personas para recoger comida y donaciones que envía religiosamente al Banco de Alimentos de Iowa. A diferencia de otras navidades, el hombre no dispone de fuerzas para colocar la iluminación. Además de contagiarse por covid-19, ha sufrido dos ictus y un ataque al corazón.
Volunteers help Iowa man keep his Christmas light tradition going strong https://t.co/ZKE7Tnu4wB #FoxNews
— Sue Just Trying To Matter in Makeup/Faded Blujeans (@MakeupFaded) December 2, 2021
"Tuvo un derrame cerebral en el lado izquierdo y derecho del cerebro... perdió la capacidad de movimiento en el lado derecho durante unos tres días", ha contado su esposa. Una vez dado de alta del hospital, Dale solo puede recorrer a pie distancias cortas dentro de su casa, lo que complicaba mantener la tradición navideña.
"Ilumina todo el barrio"
Afortunadamente, un equipo de voluntarios ha puesto pronto solución a este problema. Tras conocer la historia, Bob Coffey, propietario de la compañía dedicada a la construcción Bob the Builder, y un grupo de sus empleados, han decidido intervenir. "Es una tradición y la gente cuenta con ella", ha puntualizado Julie.
Coffey y cuatro de sus trabajadores han visitado la casa de los Marks y han estado tres horas colocando las luces y adornos por todo el patio. Al parecer, hay un total de 10.000 'bombillitas'. "Solo esa casa ilumina todo el barrio", ha indicado un impresionado Coffey".
Un barrio de Des Moines, en Iowa (Estados Unidos), acoge cada año a multitud de gente de los alrededores que llega en "coches", "autobuses" y "limusinas" al lugar "solo para ver las luces", ha contado a FOX News Julie Marks, residente en la calle Ashby. Asegura que "entrar en este vecindario es como introducirse en un libro de fantasía".
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