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¿Y si fuera mejor dejar a tu pareja por WhatsApp?
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¿Y si fuera mejor dejar a tu pareja por WhatsApp?

El cambio de perspectiva podría estar muy relacionado con el aumento del 'ghosting' a la hora de acabar una relación y del uso de teléfonos inteligentes

Foto: Fuente: iStock
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Históricamente, dejar a alguien por SMS, WhatsApp o carta certificada enviada por una paloma mensajera siempre ha parecido de personas crueles y sin corazón. En estos tiempos, aunque parece que hemos normalizado el 'ghosting' o el 'benching' y se dice que las aplicaciones como Tinder han conseguido que se democraticen las relaciones y estar en el mercado equivalga a tener infinitas oportunidades, algunas maneras de actuar siguen estando feas.

Sin embargo, ¿y si dejar a alguien por mensaje fuera en realidad la auténtica salud? SI alguna vez lo has hecho, te sentirías aliviado de no tener que confrontar a la persona cara a cara, aunque quizá un poco asqueado de tu propia cobardía. Si, por el contrario, no lo has hecho pero lo has sufrido, es probable que te sintieras confuso y enfadado, pues cortar de esa manera es como no hacerlo del todo.

Son las generaciones como la Z e incluso la Millennial, que no han vivido siempre en un mundo 2.0, los que prefieren que esa conversación se produzca cara a cara

La revista 'Mel Magazine' explica que esa preferencia porque te dejen en persona tiene mucho que ver, como es lógico, con la carencia de internet y redes sociales durante la juventud. En otras palabras, son las generaciones como la Z e incluso la Millennial, que no han vivido siempre en un mundo 2.0, los que prefieren que esa conversación se produzca cara a cara. Sin embargo, los más jóvenes podrían preferir justamente lo contrario.

A medida que avanza el tiempo y la tecnología digital se ha convertido en una característica inevitable y fundamental de nuestras vidas, tiene sentido que la actitud colectiva hacia esta manera de acabar con alguien, a base de mensajes, se suavice. Al fin y al cabo, habrás notado pequeños cambios perceptibles en la forma de actuar con tu teléfono. Ahora todas las citas se conciertan vía mensaje, y hablar por teléfono se ha convertido en la excepción.

Foto: Meg Ryan en 'Cuando Harry conoció a Sally'.

El cambio de perspectiva podría estar muy relacionado con el aumento del 'ghosting' a la hora de acabar una relación. Esto es: dejar progresivamente de hablar a la persona a la que estás conociendo o con la que has comenzado una relación de cualquier tipo, hasta desvanecerte completamente de su vida. A veces, incluso, esa persona te bloquea en WhatsApp o redes sociales sin que entiendas muy bien por qué. Se trata de un comportamiento que, pese a que todavía se considera negativo, mucha gente ha normalizado.

Los que prefieren que se haga cara a cara se excusan en que, en persona, podrán aclararse algunos conceptos y comprender el punto de vista del otro

Incluso las personas con puntos de vista opuestos sobre el tema tienden a estar de acuerdo en algunos parámetros cruciales: se considera más aceptable dejar a alguien por mensaje de texto si estaba saliendo en lugar de tener una relación seria, y si la relación es a larga distancia o se lleva a cabo principalmente en línea. Eso generalmente se considera un factor atenuante (aunque algunos todavía insisten en que una llamada telefónica o un chat de video es lo mínimo). Dicho esto, estas variables pueden generar aún más confusión: ¿Cuándo, por ejemplo, ha pasado de "citas" a una "relación seria"? ¿Es cuando dices "te quiero" por primera vez o consensuais que no saldréis con nadie más? ¿O es después de un período de tiempo determinado? Al ser tan subjetivo, es difícil.

En general, aunque hay excepciones, parece que las personas más jóvenes que han crecido con teléfonos inteligentes no tienen tan fuertemente arraigada la idea de que dejar a alguien de manera 'virtual' no es socialmente aceptable. Los que prefieren que se haga cara a cara se excusan en que, en persona, podrán aclararse algunos conceptos y comprender el punto de vista del otro. Por el contrario, los que se decantan por los mensajes, aseguran que así se ahorra la humillación y pueden sanar sus heridas en soledad. Sea como fuere, la persona se sentirá lastimada de cualquier manera, así que quizá tampoco importa tanto cómo se haga.

Históricamente, dejar a alguien por SMS, WhatsApp o carta certificada enviada por una paloma mensajera siempre ha parecido de personas crueles y sin corazón. En estos tiempos, aunque parece que hemos normalizado el 'ghosting' o el 'benching' y se dice que las aplicaciones como Tinder han conseguido que se democraticen las relaciones y estar en el mercado equivalga a tener infinitas oportunidades, algunas maneras de actuar siguen estando feas.

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